¡Reencarnado En Harry Potter!, El Rey Metamorphomagus

Capitulo 6

Ahora estaba en mi habitación. Había pasado un día desde que entramos en Hogwards, en este tiempo Desempaqué todo lo que traía en mi maleta, y como consecuencia ahora duermo en un montón de oro, joyas y baratijas tiradas por toda la habitación... Creo que la transformación en dragón empieza a afectarme.

Las clases del primer día no fueron nada iguales a la película de Harry Potter. Las preguntas de Snape fueron más... Fáciles, además, no me las preguntó a mí, Charls fue el pobre diablo al que le tocó contestar, cosa que no hizo.

Sin embargo, la segunda opción de Snape era Daphne Greengrass que logró ganar veinte puntos para Slytherin.

Ah, y cabe aclarar que Lily no asistió a las clases con Snape. De seguro la muy... Humana, se quedó llorando en su habitación o algo así, bueno, no es que me queje. Lo malo de eso es que una lechuza ya debe ir en camino a James.

Pero regresando al tema... Daphne Greengrass, tenía un severo debate en mi cerebro sobre esa chica. No sólo utiliza mejor que yo la Occlumancia, también es inteligente, con mucha clase y parece ser muy... Igual a mí.

No había escuchado mucho en la película acerca de ella, de hecho, creó no haberla visto en las películas. Pero da igual. Mientras ella sea así de interesante, habilidosa y sexy, hay un puesto en mi Futuro Grupo de Slytherins para ella.

Claro que ahora no haré algún intento de conocerla, primero es Emma... Digo Hermione. Primero la hago mi amiga, y luego me busco novia... Aunque no creo aguantar tanto tiempo, así que trataré de hacerlo lo más rápido posible.

Ahora estaba en mi habitación. Era muy sencilla, una cama matrimonial, un escritorio, un guardarropa y una ventana que daba directo a el bosque prohibido... Que cabe recalcar que por el nombre ya tengo ganas de explorar.

Además, ya el guardarropa estaba completamente repleto de ropa, y este último era gigantesco, un hechizo de expansión fue suficiente. Y ni siquiera sé porqué tengo tanta ropa, técnicamente sólo necesito zapatos. Pero en fin, soy imbécil.

La cama ahora estaba repleta de libros de magia avanzada, necesitaba estudiar un par de hechizos que no maten al contacto... Puto Dumbledore.

El escritorio estaba lleno con monedas de oro, joyas, el maletín con los Horrocruxes y un par de papeles que Greecker me mandó para firmar, de hecho, me envió tres lechuzas, un par con papeles y otra con un maletín encogido con los Horrocruxes. De saber que ese era el precio por enviarme los Horrocruxes no le habría enviado una carta.

Y finalmente el suelo de mi habitación estaba repleto de baratijas, accesorios y joyas, y no sólo el suelo, también el aire y el tejado estaban repletos de joyas, baratijas y algún que otro orbe de luz que creé con magia.

Digamos que las habitaciones no estaban tan mal, lo único de lo que me quejo es por las paredes de roca, digamos que la madera es más mi estilo. Ah, y ningún tipo aparato para cargar los celulares que traje... Maldito Hogwards.

Y con respecto a mí. Yo estaba tirado en un borde de la cama donde no habían libros, obviamente estaba dramatizando todo el trabajo que le dediqué a esta habitación para que luzca tan bien.

Luego me levante con el animo de un perro con hambre. Necesitaba hablar con Basilisco, pero era muy arriesgado con los hermanos Weasley con ese mapa, creó que lo tienen e su posesión ahora, y aunque tal vez no lo tengan, no me quiero arriesgar.

Harry:-Malekith-dije en un murmuró cansado que expresaba el hambre que tenia. Aunque afortunadamente, en un rato sería hora de cenar.

El pequeño elfo apareció en su típica bola de humo, aunque ahora era diferente. Además de estar vestido con Túnicas muy elegantes, traía accesorios de oro y algunas Joyas. Mi elfo, ahora era el más cabrón del mundo mágico.