#Ganadora: -14DarkAngel21-

62 6 0
                                    

Camino por las calles de mi ciudad natal, San Carlos de Bariloche, o como es mejor conocida; Bariloche

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

Camino por las calles de mi ciudad natal, San Carlos de Bariloche, o como es mejor conocida; Bariloche.

El frío se hace cada vez más intenso, y como se está haciendo temporada de invierno, la cantidad de turistas se va agrandando.

Paso por la calle Mitre con todas las telas. Últimamente ando estresada, y ahora que lo noto, ni siquiera el olor del chocolate que por acá venden, me tranquiliza.

Me siento en una banca y trato de relajarme un poco, pero mi poca tranquilidad se va por la borda y escucho como mi celular suena, por tercera vez en media hora. Melisa y su tonto pedido "urgente", podían esperar. Apago el celular y lo guardo en mi bolso.

Pongo la bolsa de telas al lado mío, apoyo mi mandíbula sobre mis manos y mis codos en mis piernas, y cierro los ojos.

Minutos después oigo una melodía de una guitarra cerca mío, abro mis ojos y visualizo a un hombre de más de cuarenta tal vez, con sus ojos cerrados. Toca unas melodías relajantes, algo que si necesitaba en este momento. Bajo la mirada al piso y veo que tiene el estuche de la guitarra en este, abierto.

Sonrío al ver esto y me acerco al hombre.

Me quedo por unos minutos parada en frente de él escuchando las melodías, poco después abre sus ojos y me sonríe.

Busco algo de dinero en el bolsillo de mi abrigo y encuentro algunas monedas.

—Me ha alegrado la tarde con sus notas, gracias.- le digo con amabilidad y dejo las monedas en el estuche.

Lo saludo y me voy de ahí con una sonrisa.

Darle monedas a los que bailan, cantan, o simplemente a los que piden en la calle siempre me ha gustado, las sonrisas de esas personas al darles lo que tengo de dinero, después de días de trabajo y pedidos, es simplemente hermoso.

Me alejo del lugar en que anteriormente me encontraba y sigo caminando por las calles.

Las horas pasan, sigo con la bolsa de telas y de a poco la tarde se hace noche. En estas horas, he querido olvidarme del pedido, y algunos bailarines callejeros entretuvieron mi tarde con su espectáculo, al igual que a otras personas. Tal como amo hacer, les di algunas monedas que me quedaron y seguí con mi camino.

Me dirijo a mi casa y cuando paso por la plaza que está a dos cuadras de ésta, veo el lugar más a fondo y noto un...¿pozo de los deseos?

Me acerco a éste y, definitivamente, es como esos que parecen de cuentos de hadas, de niña solía creer esas cosas. Pero nunca es tarde para creen en fantasías ¿verdad? Nunca hice esto, siempre me gustó gastar mi dinero en las personas de la calle y no en un pozo, pero siempre hay una primera vez para todo.

Busqué en mis bolsillos alguna moneda y noté que me quedaba una, pensé bien que iba a desear, y la tiré.

Vi por el agua cristalina como mi moneda caía, sonreí y seguí mi camino a casa.

Minutos después me encontraba en ésta y dejé la bolsa de telas y mi abrigo en la sala. Prendí mi celular lista para un regaño de parte de Melisa, solo tenía dos llamadas de hace dos horas, y un mensaje de hace media hora que me desconcertó.

"Perdón por haber actuado así hoy, nuestra jefa me está matando con los diseños. Te veo mañana en el trabajo, y de nuevo perdón. Hasta mañana hermanita! ♡"

Sonreí, mi deseo después de todo se cumplió: que nuestra armonía como hermanas siga a pesar de los conflictos.

Sonreí, mi deseo después de todo se cumplió: que nuestra armonía como hermanas siga a pesar de los conflictos

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.
Desafíos de Chick LitWhere stories live. Discover now