10

1.2K 107 46
                                    

—Estuve pensando, y creo que Seonghwa y tú harían una buena pareja.—dijo Yunho entrando a mi habitación sin previo aviso.

—¿De qué estás hablando?—dije riendo mientras guardaba los últimos cuadernos en mi bolso.

—Piénsalo, se verían tan tiernos.—dijo.

—No hables babosadas.—dije riendo aún.

—No son babosadas.—se quejó.—Además he visto que con él te sientes más cómoda que con todos nosotros.—dijo enmarcando una ceja.

—También me siento cómoda contigo, Yunho.

—¡Más que conmigo!—insistió.—Además, cuando te conocí, nunca lloraste ¡lo retuviste!, en cambio llegó él y ¡Pum! el mar de lágrimas. Y aun así dices que no, hieres mi orgullo, Ellie.—dijo haciéndose el adolorido.

—Voy a llegar tarde, oppa.—dije riendo saliendo de mi habitación y dejándolo ahí solo.

Salí de mi habitación y fui detenida por Seonghwa, quien se metió de repente en mi camino.

—¿Ya te vas?—me pregunta.

—Si, ya.—respondí tratando de pasar pero él no me dejaba.

—¡Hyung! Llegaremos tarde.—dice Jongho agarrándome del brazo, para salir del departamento.

En camino a la universidad, me quedé pensando en las palabras de Yunho. ¿Yo y Seonghwa? ¡Ja!

—Oppa.—dije llamando a Jongho

—¿Si?

—¿Puedo confiar en ti, cierto?—le pregunto.

—Me duele saber que ya vamos para cuatro meses que vivimos juntos, y aún preguntas eso.—dijo riendo.—¿Qué sucede?

—Pues, antes de irnos, Yunho me dijo algo, que me ha dejado pensando.—le dije y el asintió.—¿acaso me ves tan apegada a Seonghwa?—pregunté y asintió a lo que lo miro sorprendida.

—¿Dijo que harían buena pareja, cierto?—preguntó riendo.

—¿Cómo lo supiste?

—Todos lo creemos.—dijo riendo.

—¿Qué? ¿Y qué tal si la persona que me gusta eres tú?—dije y me miró sorprendido.—Estoy bromeando.

—Casi me da un infarto, Ellie.—me dijo.

—Ay por favor, ¿tan fea estoy?—dije y reímos.

[...]

Luego de un largo día, Jongho y yo llegamos al departamento. San al parecer estaba viendo una película en el sofá. Así que me acerqué para molestarlo.

—¡San-i oppa!—dije sentándome a su lado y dándole un abrazo.

—¿Qué quieres?—me miró confundido.

—Agh, ¿acaso no puedo abrazar a mi amigo?—bufé.

—Está ¿bien? Supongo.—dijo correspondiéndome el abrazo.

—¿Puedo verla contigo?—dije refiriéndome a la película.

—¡No!—negó rápidamente.—Siempre te quedas dormida, lo que implica que te quedas inconscientemente recostada en el hombro de alguno de nosotros, lo cuál no tiene nada de malo. Sin embargo, no quiero que mi amigo me odie.

—¿Qué amigo? ¿A qué te refieres?—pregunté confundida.

—Ya dije mucho.—rió.

—¡San! ¡No entiendo!—dije pero me ignoró.

•my only star• >>park seonghwaWhere stories live. Discover now