•my only star• >>park seonghwa

36

Ya había pasado una semana. Estábamos de vuelta a Corea, el tiempo pasó súper rápido.

Luego de ese incidente no ocurrió nada más, nos las pasamos super bien.

—No me quiero ir.—dice Jongho arrastrando de mala gana su maleta.

—Todo tiene su tiempo, Jongho.—le dije riendo.

—Si, igualmente podremos volver en otra ocasión.—dice San.

—Estoy de acuerdo con eso, quiero volver.—dice Mingi.

Finalmente, nos subimos al avión. El vuelo se hizo realmente largo, dormimos casi durante todo el vuelo.

Una vez llegamos a Corea, fuimos directo al departamento y dormimos, otra vez.

[...]

Desperté luego de un rato y Seonghwa estaba sentado en el borde de la cama, observándome.

—¿Qué haces aquí?—le pregunté incorporándome, quedando sentada.

—Vine a despertarte, para avisarte que la cena estaba lista, pero, me distrajo tu belleza y quedé observándote un rato.—dijo y reí.

—¿Hace cuanto?—pregunté.

—Media hora, tal vez.—dijo dudoso y lo mire sorprendida.

—¿Tanto tiempo llevas aquí?—se encogió de hombros.

—Por cierto, ya había olvidado el tema.—dice y lo miro confundida.—Sobre nuestra relación, ya sabes, hacerla pública.—dijo nervioso.

—Hwa, esta es la tercera vez que me lo pides. Tú siempre estás de acuerdo en todo lo que digo o hago y creo, que yo no he puesto tanto de mi parte en ese ámbito.—le dije y solté un suspiro.—Si estás seguro, y es lo que quieres, hagámoslo público.

—¿En serio?—preguntó asombrado y asentí.—¡Gracias!—me abrazó. —Te amo, te amo, te amo, te amo.—dice y finalizó con un beso mi mejilla a lo que reí.

—¿Cuándo lo harás?—pregunté

—¡Mañana mismo! Hablaré con la agencia.—me dice sonriendo y asentí.

Sin más salió de habitación saltando de felicidad, como un niño pequeño.

—Ah, por cierto, recuerda la cena.—volvió entrar y asentí riendo.

Fui al comedor, y me encontré a HongJoong, quien al parecer, también acababa de despertarse.

—Hola, oppa.—saludé y me senté a su lado en la mesa.

—Hace tiempo que no te escuchaba llamarme así.—dice riendo.

—Tu nombre es muy largo.—dije y reímos.

—Lo sé, ya deberías estar acostumbrada.—dije y reí.—Por cierto, ¿qué es lo que tiene a Seonghwa tan feliz?

—Ah si, mañana hablará con la agencia para hacer nuestra relación pública.

—Eso lo explica todo.—dice riendo.—Hiciste su sueño realidad.—dijo y asentí riendo.—Y cómo líder, ahora también eres mi responsabilidad.

—Pensé que ya lo era.—reproché y el se rió.

—Eres la responsabilidad de todos, Ellie.—dice riendo.

—Ahora me siento una niña pequeña, supongo que esta bien.—dije y seguí comiendo.

Terminamos de comer y HongJoong se fue a su habitación, y yo me dirigí a la de Seonghwa.