Best Friends Forever

2) Tres son tres (parte 2)

Dereck

Escucho como alguien toca mi puerta incesantemente despertandome. Me levanto arrastrando los pies y abro esta para dejar entrar a mi hermana Marlyn.

- Buenos días dormilón. Ya es hora de levantarse, tenemos una hora para estar en el aeropuerto o nuestro vuelo a México nos deja. - informa mirando todo en mi habitación.

- Hoy regresamos al internado. Lo sé. - respondí rascando mi cabeza.

- Así es. Y veo que no tienes nada empacado. - se cruza de brazos. - No te preocupes ya me lo esperaba, ve a darte un baño que yo preparo tus maletas. - se ofreció y me empujó hasta el baño.

Genial se me había pasado la fecha y olvidé que hoy regresabamos al colegio. Lo único bueno de estar ahí era que podía estar cerca de Rose, la chica más linda y popular de toda la escuela. 

Mis talentos eran cantar, bailar y actuar.  Mis padres les importaba un cuerno lo que hiciéramos Marlyn y yo esa era la razón por la que cuando quisimos entrar allí no dudaron en aceptar. Mientras más lejos mejor.

En el colegio soy el chico más popular y es por eso que debo estar con Rose, o sea, la chica más popular y el chico más popular. La combinación perfecta. Ya estuvimos juntos hace unos meses,  pero ella terminó conmigo por una tontería y esperaba que estar estos meses de vacaciones sin saber de mi le haya hecho recapacitar y volver conmigo. Se que me ama.

Todas aman a Dereck.

Cuando ya estamos listos para salir le ayudo a mi hermana con sus maletas y nos dirigimos al aeropuerto que nos dejaría en México y una limusina nos estará esperando para llevarnos directamente al colegio.

- Estoy emocionada por regresar. - expresó la chica a mi lado twiteando su regreso a la escuela.

- Yo también. Ya quiero ver a Rose. - suspiré y recibí un zape de su parte.

- ¡Olvidala! - me reprendió. Sólo para tomar notas, mi hermana odia a Rose y a sus dos amigas porque nunca la han aceptado con ellas, desde el jardín de niños.

Pero esa es una historia a parte.

Luca

Los rayos de la mañana entran en mi cuarto iluminando todo y abro los ojos.

- ¡Mamá! - exclamo tapándome la cara con la sábana.

- Hijo levantate, hoy entras al colegio y además debemos ir a ver a Ana. - en cuanto escucho el nombre de mi pequeña hermanita me paro como un resorte.

- Cierto, debo ir a despedirme de Ana. - sin esperar un minuto más corro hacia el baño.

Ana es mi pequeña hermana adoptiva. Mejor dicho yo soy adoptado, mis padres murieron en una explosión y no había nadie apto en mi familia para cuidarme así que termine en un orfanatorio y luego fui adoptado por una pareja de recién casados. Años después tuvieron una hija que ahora tiene seis años, una niña especial a la que la vida le ha jugado mal, a sus primeros dos años de vida le detectaron cáncer en el estómago y desde entonces mi familia ha gastado todo su dinero en sus terapias.

Siempre estudié en escuelas públicas, pero hace unas tres semanas alguien del gobierno vino a mi casa y le ordenaron a mi madre que debía estudiar en un lugar mejor, un lugar de prestigio. Ellos mismos eligieron el lugar. Un colegio de talentos jóvenes, o más bien un internado. Mi único talento era la fotografía, amaba tomar fotos y descubrir el arte.

Por esa razón nos mudamos al D. F. de México hace unos días, para estar más cerca del colegio. Hoy empezaban las clases y me ponía un poco triste alejarme de mi hermana y de mis padres, pero me emocionaba poder conocer más jóvenes como yo.

No me puedo engañar a mi mismo. Los nervios los tenía a flor de piel, no quería dejar a mi familia. Pero no tenía otra opción. 

Liam

Apago la alarma cuando suena y me levanto con nuevos ánimos. Hoy sería un nuevo día y uno especial. Volver al colegio no era lo que todo chico deseará, pero si cuando vivías en una casa donde eras invisible.

Salgo a desayunar cuando lavo mis dientes y termino chocando de cara con mi hermano gemelo Luis.

- ¡Ya te levantaste! Venía a despedirme de ti. - informó dándome un abrazo.

A diferencia de mí, mi hermano no estaba internado, él era un alma libre y aventurera, se la pasaban viajando por el mundo y estudiaba de manera virtual. Algo tedioso para mí.

Yo, era timidez e inseguridad en persona, no me atrevía a llamar la atención y tal vez por eso es que era opacado por Luis.

- Que te vaya bien hermano, sólo no hagas travesuras. - le contesté palmenado su espalda.

- Imposible y lo sabes. - rió él mientras empezaba a bajar las escaleras.

Su equipaje constaba sólo de una mochila, para él mientras menos cargaba mejor era el viaje.

- ¿Cuál es tu destino esta vez? - preguntó mamá dándonos a ambos el desayuno.

- Sudamérica. - respondió.

- Siempre he querido ir a Brasil. - dije.

- Hoy entras al colegio Líam. - Espetó mamá avisandome que no era un opción para mi.

- Cuando salgas de vacaciones vendré a buscarte y nos iremos juntos. - me toca el hombro.

Después del desayuno donde mamá y papá sólo le preguntaban a Luis las cosas que tenía planeada para su viaje subo a mi habitación a preparar mi equipaje.

En el colegio no era invisible porque siempre estaba con Dereck y él me trataba como un hermano, desde siempre me ha cuidado y ha estado conmigo. Para mí, él es mi hermano. Eso no quiere decir que no quiera a Luis, pero siempre estamos lejos lo que no permite que tengamos un buen vínculo.

En el fondo sentía que mis padres hubieran sido más felices si sólo tuvieran un sólo hijo, pero no fue así.

No se porque tengo el presentimiento de que este año será diferente a los demás.  Ya veremos lo que nos espera.

Esta vez presentamos a los chicos.  Sólo para aclarar algunos puntos.

● Todos ellos se conocen desde niños. 

● Luca es nuevo en el internado como verán, pero también los conoce a todos. Sólo que en la infancia de tuvo que alejar.

● Todo es inventado. El colegio es un invento de mi mente y algunas otras cosas que irán saliendo en el transcurso de la historia.

Si tienen alguna otra duda no duden en dejarlo en los comentarios. 

- Fcj-