Parte 4

7.3K 620 432
                                    

Agradezcan a wayvenus porque me llenó de spam en wpps y me obligó a actualizar jsjsjsjs.
Eso sí, empiezo la universidad en un par de horas y veré cuando podré actualizar, lo bueno es que se por donde la voy a encarar ;) al fin jsjsj
Los amo y perdón por ser un cap corto
:(







🎴

Los pasos de ambos yendo de nuevo al salón de sus estudios diarios eran pesados con toques de nerviosismo. Aún Jaemin se sentía sensible a cualquier toque, el orgasmo que obtuvo en tan solo un par de minutos fue increíble, nunca antes experimentado, creyendo que ya había probado todo, pero no era así.

Lo mismo iba para su compañero Jeno. Su pene le daba pequeños choques eléctricos, impidiendo de que dejara de pensar en lo que había pasado antes con Jaemin, su pene le recordaba mediante cortos pasos que daba, como se había sentido de manera placentera el calor y la comodidad que le otorgaba el trasero de Jaemin, entre esas pompas se sentía exquisito. Claro que antes había restregado su pene en algún culo, como símbolo de querer ya hacerlo y de lo necesitado que se encontraba, ya sea por meterla o por querer que le chuparan su pene. Pero diablos, está vez era distinto, de forma inconsciente le estaba pidiendo a Jaemin que hiciera cosas para él, sólo para él y se había sentido con mucho dominio, como nunca antes, ni con Yeeun. El suspiro pesado de Jaemin lo sacó de sus confusos pensamientos, volteando un poco al estar a unos pocos pasos de la puerta.

-Lo que pasó allí dentro no volverá a pasar.

Dijo duramente o así fue como lo sintió cuando se dirigió de esa forma hacía él, como si ambos hubieran infringido con la ley y tendrían que ahora cubrirse las espaldas para que nada saliera a la luz, pero si lo pensaba por ese lado, tenía razón al decirlo con esa seriedad.

Lo que había pasado era muy serio que hasta sentía que tenía el peso necesario para que trataran así al tema. Realmente estaba dispuesto a contestarle en ese momento, estando frente a la puerta y en ella había una tela transparente que cubría la ventana que estaba expuesta a los demás alumnos, una muy pequeña pero que en sí era reveladora. Fue allí donde agradecía a aquella cortina que los cubriera, como así lo hizo el baño, de lo que estaban haciendo, o de lo que Jaemin tenía pensado hacer.

Fue sorpresivo cuando el menor de ellos se acercó invadiendo su espacio personal. Le bastó con estirarse un poquito, por la diferencia de altura, hasta que sus manos sostuvieron el cuello de Jeno, y de forma sorpresiva, estaban haciendo presión en él. Pero allí estaba, disfrutando como Jaemin lo estaba sofocando de una forma muy sensual y sexy, estaba allí perdido en la mirada para nada inocente de su amigo, se estaba lastimando su labio, hasta que su lengua se encargó de delinear la zona mordida. Para ese entonces no tenía la capacidad para apoyar sus propios pies ante la realidad.

-A pesar de que estuvo mal...

Susurró entre suspiros. Ese no era el Jaemin que conocía, el tierno que le daba abrazos de oso, el tierno que a la vez era varonil, siendo rudo con todas las chicas, era otra persona, se había transformado en otra y fue allí donde se dio cuenta de que Jaemin era un chico lleno de sorpresas. Ante Jeno era una persona completamente distinta con respecto a los demás del entorno, lo cual lo hacía sentirse especial y querido por el menor, él si podía sentir la química de ambos, hasta ese encuentro un poco extraño. En eso, no se esperó a que Jaemin acercara sus labios en su mejilla y le diera un fuerte y sonoro beso. Pero de pronto se veía ahí, estático, sintiendo como esos besos rudos bajaban hasta la mandíbula firme que el peli negro poseía, y cada vez que bajaba y hacia contacto con su piel la presión en su cuello era todavía aún más, peor era cuando sentía que por momentos se quedaba sin aire. Cuando Jaemin se enteró de que a Jeno le gustaba el masoquismo, decidió intentar jugar por ese lado, y por lo visto si estaba funcionando.

-Me gustó mucho Jen.

Esa declaración hizo que sus manos se ubicaran en la cadera del menor, quien no soltaba para nada su ancho cuello, y es allí donde su lengua sale a flote, atravesando todo a su paso, hasta terminar en su oído, lugar donde recibió pequeñas mordidas y sin faltar la presencia de la respiración rápida y necesitada de su mejor amigo.

-Jaemin... detente.

Suspiró Jeno. De verdad todo esto se estaba volviendo incómodo, no se sentía bien, pero a la vez su pene iba contra sus pensamientos. La cercanía de Jaemin no ayudaba nada, ni mucho menos cuando hacía algún movimiento, sus hombrías rozaban entre sí, lo que ocasionaba repetir el pasado. La cabeza de allí abajo anhelaba que algo más pasara pero su razón dice otra completamente distinta, es como si el diablo y el ángel aparecieran en su hombro, atormentándolo. Lo tomó por sorpresa cuando Jaemin se separó de él, recibiéndolo luego con una tierna.

-Tranquilo, era una broma.

Todavía con esa sonrisa, una "graciosa" por cierto, se alejó repentinamente de Jeno, quien tenía muchas cosas por decir ahora que estaba un poco más calmado pero aún seguía atormentado. No dejó que Jaemin se fuera así, las cosas no se iban a quedar de esta forma.

-¿Q-qué mierda fue todo eso?-sus manos sentenciaban su primera pregunta, haciendo que Jaemin soltará una risa, parecía que su amigo se volvería loco.-N-no le veo nada gracioso a esto.

-Si lo es, es súper gracioso ver cómo estás tan nervioso por unos simples roces de tu mejor amigo...-una mano de Jaemin se pasó por la mejilla que estaba todavía húmeda por su saliva.

-Eso es... mentira, no jodas.-de mala gana, quitó la mano que le estaba dando caricias suaves, ahora conservaba una arruga en el entrecejo.

-Mejor no diré nada.

Jaemin se despidió de su amigo haciendo un signo de paz con sus dedos, algo muy característico de él, sin que faltara esa estúpida sonrisa alegre que se la mostraba a todo el mundo y la cual la usaba mucho para el ligue con chicas. No fue una despedida como tal, ya que a Jeno también le correspondía entrar y seguirlo, lo peor era que tenía que seguir sintiendo su molesta presencia por las próximas horas durante la mañana.

No había nada para acotar sobre lo que había pasado por el resto de la mañana. Como siempre, las charlas sexuales estaban ahí, pero había algo que cambiaba por completo ese ámbito de amistad entre su pequeño grupito. Sentía constante la mirada de Jaemin, siempre lo confirmaba cuando chocaba su propia mirada con la de él, era muy obvio que no podía dejar de pensar en lo sucedido, es más, él estaba en las mismas condiciones y es allí donde el problema se divide en dos. Quizás para Jaemin había sido un simple juego que se le había escapado de las manos y bueno, se había adentrado en el papel de una chica que le encantaba sentir una polla en su culo, de una puta. Y es allí donde a Jeno le parecía una aberración, su amigo no era una chica que lo quería por su entrepierna como varias en el instituto, pero es que su necesidad y sus súplicas no decían lo mismo, lo cual daba a lugar al miedo a que las cosas se pusieran tensas y confusas entre ellos. Como para destacar otra cosa, no compartieron mucha charla entre ellos en el último receso, ni mucho menos en el aula, cada uno estaba sumergido en sus pensamientos. Quizás para muchos era algo pasajero y listo, pero para ellos era nuevo e increíble de imaginar o pensar de que en algún momento llegara a pasar.

-Yeeun me invitó a una pijamada con temática, ¿Quieres ir?-preguntó un poco ido, yendo al lado de su amigo hacia su casa.

-No es mala idea, me gustaría.

-Quien sabe...-sonrió de lado, ubicando uno de sus brazos alrededor de los hombros anchos de su mejor amigo.-Podrás ligarte a alguien.

Jaemin se dedicó a negar mientras sonreía, Jeno lo conocía muy bien. Pero había algo que le ocultaba a su amigo y quizás no lo iba a sospechar ni en un millón de años, irá a esa fiesta por una única razón y un poco descabellada: quería olvidar los putos toques de su amigo en su cuerpo. Su brazo lo estaba asfixiando de alguna manera y no por meter una miserable presión en la zona, sino que su cuerpo había creado una especie de sensibilidad ante el toque de Jeno, se había dado cuenta apenas había salido del baño. Durante la mañana, Jeno lo había acariciado un par de veces y siempre ocurría lo mismo: su piel se erizaba. Tratará en lo posible de olvidar todo lo que pasó, por más que fuera complicado.

Debatía consigo mismo mientras Jeno le acariciaba su mejilla con su enorme nariz.














SMILEJAEMIN




Straight Curiosity | Nomin [+18]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora