La gran escuela armada de navegación "Atlanta" se complace gratamente con el nuevo año de ingreso. los postulantes, jóvenes desde los diecisiete años pueden ingresar luego de rendir un total de tres examenes. si apruebas, eres privilegiado de aborda...
"Somos brújula y timón sí, hay tanto amor" Pedro Capo.
Bitácora del buque 213 Atlanta: La travesía del buque escuela naval está pronta a llegar a su fin. Quedan exactamente doce días de retorno con el cumplimiento de la misión. Ha sido difícil, nunca antes se había ante puesto un mal procedimiento como el tema de la supervisión exhaustiva del mapa de navegación, con el problema evidenciado, se llega a finiquitar que, el buque del Atlanta ha sufrido un atentado, en el cual, el planisferio ha sido modificado con la finalidad de producir un terrible accidente a quienes se encuentran a bordo del buque escuela.
Tal y como se explica gráficamente en la imagen, desde la salida en el puerto de Eng. Los kilómetros de navegación fueron dirigidos en sentido errado, ocasionando la colusión e inestabilidad en muchas situaciones con el Atlanta. El paso por Horta y Florida, desequilibró el sistema electrónico del barco, volcando la brújula, el sistema de gps, y comunicación a larga distancia con la escuela naval.
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Además, se presentaron dificultades naturales y físicas como la acumulación de campo magnético a sobre línea, ataque de insectos de especies marítimas y altas marejadas que culminaron con la mayoría de los inquilinos, dañados y en el peor caso, un fallecimiento. Actualmente se está evaluando la autopsia poco clara de la pérdida. Esperamos llegar con vida. Capitán Harry Styles. Firma.
Los ojos del capitán estaban demostrando su cansancio. Cuatro días habían transcurrido desde el duro incidente en el Atlanta. El clima era aún más hostil del que usualmente se respiraba. Por cuestiones evidentes, el cuerpo fallecido de la joven Erín fue cromado y guardado para entregarlo al familiar correspondiente. Todo resultaba ser tan ínfimo, irreal. Nunca se enfrentó a algo como esto. Nunca nadie se dañó o murió dentro de su barco; hoy tenía que aceptarlo, renovar sus fuerzas, mostrarse fuerte ante los cadetes, ante el equipo de trabajo, ante Dios, ante quién fuese.
Quedaban doce días para terminar la misión: recaudar vestigios del buque Avon. Doce días, y no tenía idea como proceder. De momento estaban a salvo, pero temía acercarse unos metros de más y asesinar a todos. Ya ha muerto uno, pueden terminar muriendo todos.
— ¿Papá? —Frank enunció. Harry apartó la vista del libro de bitácoras para mirar a su hijo. El ojiesmeralda estaba sentado en su cama bebiendo una coca cola.
—Lo siento, me fui por un momento... —sonrió el mayor. Se puso de pie, lanzando el lápiz sobre el escritorio. — ¿Me decías?
—Estaba pensando en que... cuando regresemos a casa, podríamos ir a la montaña, con... mamá —sugería el menor. Harry le miraba expectante. —Adeline tiene clara las cosas y tú también, no habría... problema.
