O3

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"raúl, ¿puedes leer el primer párrafo?", le preguntó la profesora.

el moreno la miró por unos segundos, mordiéndose el labio, para luego negar con la cabeza, bajando la mirada.

la profesora se acercó caminando a su mesa. una vez estuvo junto a él, se agachó para quedar a su altura y lo miró.

"¿por qué no?".

raúl se encogió de hombros.

no le gustaba leer en alto.

eso hacía que la gente se fijara en él y se percatara de su existencia, cosa que no quería que nadie hiciera.

odiaba ser el centro de atención, aunque eso era justo lo que ocurría en ese momento.

podía sentir las pesadas miradas de sus compañeros sobre él. incluso escuchaba los susurros que compartían entre ellos, probablemente diciendo cualquier cosa mala sobre él.

¿por que parecía que todo lo que tenían para él eran malas palabras y miradas?

¿se merecía todo aquello?

"¡porque no sabe leer! ¡es idiota!", gritó manuel desde el fondo de la clase.

la profesora de giró hacia él y le dedicó una mala mirada.

"manuel, cállate".

el chico se limitó a asentir mientras el resto de la clase se reía. todos menos un castaño, que contemplaba todo con disgusto.

"bien, raúl, pues te quedarás a hablar conmigo cuando acabe la clase", le indicó.

el chico asintió y se encogió en su asiento. sentía uns vergüenza y unas ganas de llorar terribles en ese momento.

solo quería que las clases acabaran de una maldita vez para poder encerrarse en su cuarto y ahogarse en sus lágrimas hasta quedarse dormido.

"borja, ¿puedes leer, por favor?", su profesora se dirigió esta vez a su compañero.

él asintió y leyó fluidamente el párrafo. raúl disfrutó de la voz del chico mientras éste leía.

amaba su voz.

la amaba porque era de las únicas voces que podía escuchar estando seguro de que nunca le dañaría.

la clase acabó más rápido de lo que el moreno había pensado.

quizá todo pasaba más rápido cuando estabas sumido en tus pensamientos. sobretodo si esos pensamientos son sobre algo o alguien que realmente te gusta.

recogió sus libros rápidamente y esperó a que los idiotas con los que tenía que compartir parte de su día salieran de la clase.

una vez que lo hicieron, se acercó a la mesa de la profesora, que tecleaba en su ordenador con rapidez.

dejó de hacerlo en cuanto el chico, cabizbajo, llegó junto a ella.

"raúl, ¿qué te ocurre?", le preguntó. "parece que no te quieres esforzar para aprender, o que no lo intentas".

él se mordió el labio fuertemente para no comenzar a llorar, sabía que acabaría haciéndolo en cualquier momento si seguían conversando sobre aquello.

al ver el rostro de su alumno, la expresión de la profesora se relajó, adoptando una más protectora, de madre.

"hey, mírame", hizo lo que le pidió. "puedes contarme lo que quieras, no saldrá de aquí".

"yo... todo está mal conmigo".

"¿a qué te refieres? sé más específico, por favor", pidió.

raúl volvió a morderse el labio. esta vez, la sangre comenzó a salir de éste, pero no le tomó ninguna importancia.

¿cómo iba a explicar aquello? le resultaba verdaderamente difícil hacerlo ante cualquier persona, por eso odiaba que le preguntaran por ello.

"tengo migrañas y ansiedad", susurró.

"oh, vaya...".

lo que ni él ni su profesora sabían era que no se reducía solo a migrañas y ansiedad, raúl tenía esquizofrenia.

además de las migrañas, tenía alucinaciones, transtornos en el pensamiento y delirios.

sus padres no querían que él supiera sobre ello, creían que era mejor para su salud mental que pensase que todo se limitaba a lo que él creía.

no querían que supiera que sus alucinaciones no eran reales.

estuvo un rato más hablando con su profesora, o más bien escuchando todo lo que ella iba diciendo.

cuando se cansó, le dijo que tenía algo importante que hacer y se despidió de ella para luego salir de la clase.

al salir, se encontró al castaño esperándole en la puerta, sonriendo ampliamente.

su corazón comenzó a latir aceleradamente cuando vio que estaba allí. estaba allí por él.

"¿te acompaño a casa?", le preguntó el castaño.

raúl asintió con una sonrisa.

cuerdo ; luzuplay.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora