Los ojos del cambio (Los nacidos de Aigma #1)

Capítulo 9: Replica.

Habían pasado 6 semanas y yo tenia una cantidad de valvas gigantesca acumulada. Así que, recordando la estructura de las redes del barco pesquero, supuse que una estructura con esa naturaleza me ayudaría a transportar las valvas. Debido a eso busqué por los alrededores cualquier cosa que pudiera ayudarme.

La canción sonaba levemente en mi cabeza, lo cual me calmaba y causaba que buscara detenidamente y sin atropellos algo que me ayudara con mi cometido. Encontré un banco de algas luego de media hora  de rondar por la zona. Eran plantas largas, no muy anchas, y parecían resistentes. Arranqué una del sustrato y junte sus extremos para formar un círculo. Debía atarla… ¡Debía atarla y no tenia idea de cómo hacerlo!

Busque en mi memoria genética  información sobre como hacer nudos: no encontré nada. Absolutamente nada. ¿Cómo es posible que la raza más adaptable del universo no posea un banco de información sobre nudos? No seremos niños exploradores,  pero se agradecería un poco de información sobre nudos  cuando dejan a uno en un planeta desconocido.

Me sentía extraño, no tenia la respuesta a algo en teoría simple, sabía que se podían atar cosas, sí, ese verbo estaba presente en uno de los tantos diccionarios genéticos que poseemos. Pero figurarme cómo…eso era lo difícil. Y creo que todo humano es conocedor de lo que se siente no saber cómo hacer un nudo. Era pequeño,  podría haberle pedido a mi progenitor que me enseñara, tal como ustedes lo hacen… si no fuera porque no tenia idea de quien era, y probablemente estaba a años luz de él. Y casi seguramente es un bastardo que si alguna vez escucha mi historia va a reír entre dientes antes de apuñalarme por la espalda. Sí, así pienso a mi padre-madre. Y les diré que no  me importa lo más mínimo si algún día lo conozco o no: la única madre que merece respeto es Aigma; ese lugar de tal hermosura que opaca hasta al nudo más bello.

Juro por la gloria eterna de mi raza que  algún día escribiré (en caso de que me sea posible) un manual sobre nudos. Y plantare un árbol. ¿Tener crías? es fácil cuando no necesitas una hembra para hacerlo (Por cierto, me gustaría que tuvieran un idioma más neutral, ya que me veo obligado a identificarme cómo macho cuando no soy ni macho ni hembra).

 Igualmente, tenia que arreglármelas de alguna manera. Así que comencé observando el alga que había arrancado. Me puse al tanto de su textura, de su ancho, de su largo, su flexibilidad…en resumen, todo lo necesario para que pudiera hacer un nudo. Pero no conocía la técnica; tenía los ingredientes, pero carecía de la receta.

Así que comencé  poniendo ambos extremos juntos, uno encima del otro. Los presione por fuerza a ver si se unían. Y como no pude, descarte la soldadura en frío como método para unirlas.

Luego la enrosque alrededor de una de mis patas y procedí a tirar de un extremo con la otra, a ver si ocurría un nudo. Cedí luego de tres intentos donde no logre hacerlo.

Pero estaba lejos de rendirme, tenía la certeza de que se había hecho antes, y el método científico estaba de mi lado. Así que continué probando ideas bastante idiotas, entre ellas intentar negociar con el alga en tres idiomas diferentes.

En un momento logré hacer un nudo simple, aunque antes de eso consulte varios conocimientos sobre fricción  y otros conceptos de física. Tardé un par de horas en perfeccionar el atar y el desatar de las puntas del alga. Pero lo logré: había hecho un nudo resistente y ajustado. Creo que si no lo lograba entonces, saldría del agua, buscaría la tierra más cercana, y aprendería como hacer uno corredizo. Luego, buscaría un árbol alto con una rama sobresaliente… y me ahorcaría.

Arranque varias algas más y comencé a unirlas entre sí.  Nudo tras nudo iba formándose lentamente una red. Debo decirlo, con las patas que tenia en ese entonces era un poco más difícil que ahora atar cosas, las membranas interdigitales  dificultaban un poco la tarea. Así que me ayudaba con la lengua, la cual se me quedo en ocasiones atorada en un nudo (no tenia un espejo, pero la imagen mental que poseo de la posición que tomaba es muy graciosa).