Una Novia Para Shoto [PAUSADO]

♦ Capitulo 8 ♦

1217 palabras
"Los personajes de esta obra
no me pertenecen"

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– ¿Tienes alguna idea de por qué tu ansiedad volvió 18 años despues? – habló la terapeuta a la que Shoto había decidido ir tras dos semanas de tener fuertes ataques de ansiedad que le hacían perder la conciencia, había decidido eso tras un conflicto con sigo donde las creencias de su padre seguían estando presentes, decidiendo al final que su viejo era un viejo desquiciado y que si lo hacia posiblemente lo molestaba, lo ultimo le dio toda la motivación que necesitaba.

– Entiendo que la primera vez fue por un suceso traumático, tu figura materna era quien mantenía tus emociones controladas, y cuando ya no estuvo mas se desbordaron. – Shoto asintió de acuerdo comprendiendo sus palabras recordando el como siempre que pasaba algo que llevaba al límite sus emociones, iba con su madre para tranquilizarse.

– Mi madre fue quien causó mi cicatriz, pero en realidad nunca la culpe por ello, yo solo quería que ella me perdonara por ser., así – confesó sentado frente a la mujer mayor que se mantenía con una libreta en mano y lápiz en la otra apuntando lo que mas le resultaba relevante.

– Pero sabes que tampoco fue tu culpa, ¿cierto? – preguntó, pero Shoto dudo, dudo por que siempre había considerado que la culpa de todo por lo que su madre vivió era por su simple nacimiento. La mujer suspiró al ver la duda en el rostro de Shoto, así que decidió no tocar el tema, al menos por el momento – ese tema lo podemos ver en otra cesión, ahora dime ¿alguien entró o se alejó de tu vida hace poco? – El sabía perfectamente que todo era por Izuku, lo supo desde que había salido de su departamento y por segunda vez se sintió abandonado. Sin embargo seguía renuente a decirle a aquella mujer, estaba en ese lugar, pero no quería que lo tacharan de loco mas de lo que el ya lo hacia.

– p-podria decirse – trago saliva esperando que creyera lo que le iba a decir – bueno, eh, un amigo mio me presto a su gato – sintió un pinchazo en el pecho por referirse a Izuku como una mascota, pero era lo único que se le había ocurrido. – Yo, me encariñe mucho con Izuku. ¡A-asi se llamaba el gato!. Lo quería mucho a pesar de solo haber convivido con el dos semanas, me hacia sentir pleno y con el a mi lado mi insomnio desapareció. Cuando se fue yo sentí ese vacío, incluso peor que cuando mi madre se fue, por que no pude hacer nada para que se quedara conmigo.

– este "gato" parece ser importante para ti – reconoció la psicóloga entendiendo que se trataba de una persona por como lo describía, aun que no descartaba el que realmente fuera un gato por lo que optó por preguntar algo que se lo confirmara – ¿has intentado tener alguna mascota para llenar el vacío que dejo la mascota de tu amigo? – Shoto en lo único que pensó al escuchar esas palabras fue en citas con otros hombre, pero de inmediato descartó la idea, y no por la critica social, era mas el que no podía verse con otro hombre que no fuera el de cabello y ojos verdes.

– no, es extraño, pero solo quiero a ese gato – respondió creyendo que realmente la mujer había creído su mentira, sin embargo habia afirmado la sospecha de la doctora.

– y el, ¿quiere estar también contigo?

Shoto suspiró con pesar antes de contestar: – No lo se, pero se fue y ni siquiera pude despedirme...

⏳🧊⏳

La mujer le había aconsejado distraer su mente, correr por las mañanas: lo cual hizo. Comer saludable para que también su cuerpo no se sintiera tan fatigado, leer, hacer algún deporte. Y realmente había funcionado, por las noches dormía un poco mas por el simple echo de cansar a su cuerpo, aun que aun sentía su corazón roto como si hubiera terminado una relación de años, eso le parecía dolorosamente gracioso.