Las flores de su jardín crecían más vigorosas y fuertes a medida que las regaba con la sangre de una nueva víctima. Pero su insaciable locura lo llevaba a querer conseguir más muertes.
Fue entonces cuando el florista se topó con un bello tatuador.
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Flor de trébol:Mayormente conocida como Oxalis. Son plantas anuales o perennes. Las hojas están divididas en tres a diez o más partes, acorazonadas o lanceoladas, en un ramo con todos los folíolos de igual tamaño. La mayoría de las especies tienen hojas de tres folíolos; en esas especies, las hojas son superficialmente similares a algunos tréboles (planta herbácea de hojas compuestas por tres folíolos redondeados, y flores de color blanco, rojo o púrpura, agrupadas en apretados capítulos). La flor tiene cinco pétalos, fusionados en la base, y diez estambres; el color del pétalo varia de blanco, rosa, rojo, amarillo. El fruto es una pequeña cápsula con muchas semillas. La raíz es frecuentemente tuberosa, y muchas especies también se reproducen vegetativamente produciendo bulbos. Tiene el significado de "se mío", por lo cual es muy solicitado para regalar y ofrecer el amor.
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Era sencillo entender el significado de ese nuevo tatuaje en la piel del florista. Una flor ubicada en su brazo izquierdo queriendo decir que se había acabado. Que ya no estaba dispuesto a dar la vida de Jungkook para que sus plantas se vieran más bonitas, pues ahora había encontrado la forma perfecta de hacer que sus flores duraran de por vida, una eternidad. Y eso era gracias al colorante que estaba impreso en su cuerpo. Una flor cuyas raíces eran de tinta. Y no era irrigada con sangre. Estaba más que orgulloso de poder tener una nueva forma de concentrar su obsesión por los brotes, y mucho mejor era que Jungkook era el encargado de ayudarlo con esa nueva tarea.
Pero aún tenía un problema, y ese era Yoongi. Su deseo por matar al pálido seguía intacto, puesto que no quería obedecer sus normas. Estaba dispuesto a, luego de aceptar el primer desafío que le había impuesto, matarlo sin piedad alguna. Enterrarlo en su jardín, sin importarle cuanta sangre pueda mancharlo, y demostrar con esa última ofrenda que comenzaba una nueva vida como florista normal, ensuciándose sus manos con tierra y no con fragmentos de otro cuerpo.
Estaba ocupado planeando el final. No le diría nada a Jimin, pues sabía que el torpe arruinaría todo y no lo dejaría seguir. Él estaba completamente enamorado del Yoongi, por lo que no querría que Taehyung lo matara. Esperaba que sea sencillo cortarle el cuello, cuando el otro creyera que Taehyung estaba completamente a su merced, acabaría muerto en un santiamén. Pero antes debía demostrarle que estaba dispuesto a seguir sus órdenes, cumpliendo la tarea de matar, o al menos capturar, a Jung Hoseok.
Por la noche salió del local, vestía de negro, preparado para el atraco. Chocó con Jungkook, por no prestar atención al camino.
-Hola, Taetae. ¿Venías a hacerte otro tatuaje?
-No. Tenía que verme con Jimin.- No pensaba decir que se vería con Yoongi, pues luego resultaría sospechoso que su desaparición coincidiera con el encuentro con él. -Jungkookie, voy a hacer algo que no te va a gustar, pero que a ti no te afecta. Pienso terminar con todo, y olvidarme de mi pasado. Solo para estar contigo y no tener remordimientos.
-Bien. Supongo que te apoyo, ¿Eso significa que somos novios?
