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Se paró en medio del escenario, con toda seguridad, me encontró entre el público y me sonrió cuando me miró, pero rápidamente miró al publico en general, dio una reverencia y se dio la vuelta para sentarse en el banco del enorme piano de color negro brilloso.

Como me dijo antes, dejó las manos en las teclas, respiró profundo tomándose todo su tiempo y cuando estuvo segura, comenzó a tocar.

Me encantaba la elegancia que emanaba de ella cuando estaba delante del piano, el modo relajado en el que movía sus manos. Hoy no llevaba ningún anillo y llevaba las uñas pintadas de color negro liso.

Jamás había estado en un concierto de estos, así que no sé mucho cómo funcione y no sé si lo que ella hace es normal.

Después de tocar tres piezas, una más animada que la otra, se levantó del piano y un chico vestido de negro apareció corriendo para entregarle un micrófono, ella hizo algunos comentarios sencillos pero divertidos y después preguntó quién gustaba de subir a tocar alguna pieza, a lo que un hombre de traje y calvo levantó la mano y ella lo invito al escenario con una enorme sonrisa.

Lo tomó de la mano en cuanto llegó a los pies del escenario para ayudarlo a subir, lo dejó en el banco del piano y el hombre tocó. Isabella permaneció de pie lejos del piano, pero atenta. Mis ojos estaban más en ella que en él hombre, parecía disfrutarlo, porque sonreía.

El hombre terminó y todos aplaudieron, le dio las gracias y lo tomó de la mano para que bajará y regresará a su lugar, en ese momento dos hombres de negro aparecieron empujando un piano como el que ya había en el escenario, pero de color blanco y lo dejaron encajado con el otro, como si del símbolo del yin y el yang se tratara.

Ella dijo el nombre de una canción y después pregunto si alguien gustaba tocar con ella, esta vez una chica de unos 20 años levantó la mano e Isabella la llamó al escenario de inmediato. La chica se sentó en el piano blanco y ella en el negro y ambas tocaron.

Y así fue, por momentos ella tocaba sola, por momentos invitaba al público y hacia algunos comentarios cómicos, haciendo de todo esto más entretenido, pero la mayoría del tiempo ella toco sola, así, por 1 hora y media.

Al final, ella hizo una reverencia entre los aplausos, dio las gracias, nos deseo una agradable noche y salió del escenario.

-Es tan linda -dijo mamá -es una chica muy carismática

-Vamos a conocerla -dije

Nos levantamos de nuestros lugares y una mujer nos preguntó si teníamos boletos VIP, nos guió por una puerta y salimos por otro lado de ese auditorio.

Había varias personas, quienes abrazaban a Isabella, las mujeres la tomaban de las manos y le decían algo que ella con amabilidad les contestaba con una sonrisa, se hacían fotos con ella y le regalaban ramos de flores, cartas y bolsas con algún regalo dentro.

Mis padres y yo solo la mirábamos de lejos. Esperando el momento indicado para acercarnos.

Isabella

Mientras saludaba a algunas personas que habían venido, no pude evitar lanzarle algunas miradas rápidas a Namjoom a quien ya había visto antes. Estaba a lo lejos, con sus padres a un lado y con sus manos escondidas en su espalda.

Casi terminaba e iría directamente con él, pero cuando me despedí del último hombre apareció Isaac. Con un traje blanco, zapatos negros y camisa azul marino.

-¿Qué haces aquí?

Él normalmente no viene a ninguno de los conciertos, no entiendo qué hace aquí.

-¿No puedo? -sonrió -vine a felicitar a mi prometida no oficial por una presentación exitosa

-No quiero hablar contigo, me siento muy feliz como para lidiar contigo

-No te molestes -sacó su mano de su espalda y me entregó un ramo de tulipanes con punta rosada, los que me gustaban -felicidades

No pensaba tomarlos, pero cuando escuche la voz de su madre, los tomé de inmediato.

-Querida -dijo -tocaste de maravilla

-Muchas gracias ¿Cómo se siente el día de hoy? -ignore a Isaac y me acerqué a su madre

-Me siento muy bien, escuchar tu música siempre me hace sentir muy bien

-Eso me hace tan feliz

Tomó aire con su mascarilla.

-¿Verdad que mi hermosa novia es increíble?

Sentí como Isaac deslizaba su mano por mi cintura y me acercaba a él.

-Divina -dijo su madre

-¿Quieres que vayamos a cenar? -preguntó él

-No, lo siento, aun tengo cosas que hacer

-¿Qué cosas a esta hora? -preguntó su madre

-Algunas... cosas -sonreí nerviosa

-Querida, vamos a cenar -chillo su madre

-Sí, amor, yo invito

Lance una rápida mirada a Namjoom quien me miraba fijamente y con un rostro serio.

-Espérenme afuera y veré si puedo zafarme de mi pendiente ¿Sí?

-Bien, bien -dijo emocionada su madre -te esperamos en el auto, querida

-Claro

Me tomó de la mano y me dio un beso en la mejilla.

-No tardes -dijo Isaac

-No

Me quería alejar rápido de él, pero él solo me apretó aún más fuerte de la cintura.

-¿No me darás un beso?

-¿Q-Qué? -pregunté con una sonrisa nerviosa

-Un beso, aquí -señaló sus labios con su dedo

-ah

No podía decir que no o su madre diría algo, justo ahora nos estaba mirando con una enorme sonrisa esperando el beso.

Dejó su mano en mi nuca y me empujó contra sus labios.

Yo intentaba alejarme al hacer mi cabeza hacia atrás, pero él hacia fuerza y me empujaba contra él, hasta que después de unos segundos pude alejarme.

Su madre sonreía muy feliz y él se lamió los labios, victorioso.

Estúpido.

Miré a donde Namjoom, pero él ya no estaba, ni sus padres.

Iban caminado hacia la salida, su madre acariciaba su espalda y su padre solo caminaba a un lado de él.

Maldición. Yo no quería que se enterara de Isaac de esta manera.

-Te esperamos en el auto, querida -dijo la mujer

-No... -dejé de mirar a Namjoom y la miré a ella -creo que puedo ir a cenar ahora

-¿En serio? -sonrió

-Sí

-Que bueno, vamos, vamos

Mi Querida Profesora (KimNamJoon)Where stories live. Discover now