Novela Ligera- Beast Bungou Stray Dogs

4

El tiempo fluye.
El tiempo fluye.
El tiempo simplemente fluye.

El detective Kenji Miyazawa dijo. Llegó la noche, la mañana viene. Se acerca la primavera, se acerca el otoño. Todo es mitad a mitad y es la esencia de la naturaleza que es una estructura tridimensional que une lo malo y lo bueno, la parte delantera y trasera,lo bueno y lo malo, esos aspectos... Y eso está bien. No hay nada en este mundo que no lo haga.

Incluso si es posible en el mundo de un libro.

-Hahaha, vamos Akutagawa-kun ¡Una hamaca hecha con tu habilidad!-

En la oficina de la Agencia de Detectives, Ranpo reía alegremente.

-Ranpo-san, es para que pueda dormir en una siesta en la oficina...-

-No me importa. Después de cuidar huérfanos, también descubrí que tu habilidad es útil como campo de juegos. Ahora vamos a proveer el mejor balanceo de dos minutos para un sueño perfecto de Ranpo-san.-

-Akutagawa-kun...Desde que te uniste a la Agencia tus habilidades no relacionadas con la batalla han aumentado...-

-Sí. Lo ves, Ranpo-san ya se quedó dormido. Es todo un trabajo arrullar niños,déjamelo a mí.-

-Uhm... Pero Ranpo-san no es un niño...-

Ya no hay perros callejeros que no tengan a donde ir. Akutagawa fue a ayudar a Kenji al campo en uno de sus días libres. Cada vez que los dos se encontraban, "la proporción de pesticida...", "Un pesticida neonicotinoide afecta la biota..." "Sí, sí es un agente piretroide ...", "pero, en ese caso...", hablaban durante horas en términos técnicos que eran totalmente incomprensibles para los humanos.

Akutagawa vivía de esa manera.

Kunikida ya no le imponía papeleo a Akutagawa y lo designó como "embajador del triturador y ex comité de moral pública". Le entregó a Akutagawa todos los documentos que necesitaban pasar por la trituradora a diario. Akutagawa rompía los documentos en pedazos y gritaba "¡descartado!", con más alegría de lo normal.

Akutagawa vivía de esa manera.

El tiempo pasaba.
La gente moría, y vivía.

El chico llamado la Parca Blanca de la Port Mafia se despertó en la cama de la oficina del doctor.

-Oh, ¿estás despierto? -

Miró a su alrededor con la vista borrosa. No sabía nada. ¿Dónde estaba ahora?, ¿por qué estaba durmiendo?.En su brazo había un tubo de goteo inyectado y junto a él, una mujer extraña estaba de pie.

-Santo cielo, si pasaba un poco más de tiempo habrías muerto.-dijo la mujer extraña.

Era una chica hermosa de bata blanca. Parecía de alrededor de veinte años, rubia y de ojos azules... Parecía europea.La mujer parecía estar extrayendo sangre.

-¿Dónde estoy?- preguntó Atsushi.

-Uh, te rehusaste a comer y colapsaste hasta casi morir de inanición, el director se hizo cargo de ti- dijo la enfermera rubia de ojos azules. -¿No lo sabes? La inanición, un ser humano no puede sobrevivir con ello.No puedes hacerlo. Es imposible para ti.-

-¿Inanición?-

Ciertamente,después de la muerte de Dazai, Atsushi no supo qué hacer. Dejó de comer, abandonó Yokohama y vagó sin rumbo. No entendía muy bien la razón. Pero... No podía evitarlo.

-No quieres morir y simplemente no quieres vivir. Son cosas completamente diferentes...-

-Es suficiente, Elise-san- Desde el otro lado de la habitación, una persona escondida en una sombra dijo en voz baja.