Una Semana con Vause

Cap 6 Condiciones

Aquí les dejo uno mas, espero les guste....

Cuando el taxi de Piper aparcó delante del Gran Hotel de Bahamas, ella tomó aire antes de salir, su pecho estaba a punto de explotar de ansiedad, en unos momentos estaría frente a ella, frente a Alex, y su cuerpo lo sabía perfectamente......

—Bienvenida al Gran Hotel de Bahamas. El joven botones que apareció enseguida junto al taxi, la saludo muy educado.

—Gracias. Piper, pagó al taxista, que aceptó su paga y propina encantada, la rubia siguió al botones a la entrada, la zona de recepción era amplia y luminosa, y estaba rodeada de plantas exuberantes.

La  recepcionista la saludó muy atenta. Su nombre era Keyla Collins.

Piper trató de no mostrar los nervios que sentía.

—Vause. Dijo al nerviosa —La reserva está a nombre de Alex Vause.

 La recepcionista sonrió.

—Le ruego que me disculpe, señora Vause. La señora Vause no nos dijo que llegaría esta noche.

Piper abrió mucho los ojos. ¿Es que Alex sabía que ella iría? ¿Se había enterado de que ella había cambiado la reserva?

—Jimmy. Llamó la señorita Collins. —Acompaña a la señora Vause a la suite 410, la suite Calipso.

Piper abrió la boca para explicar que ella no era la señora Vause, pero la situación le pareció muy embarazosa, su intención había sido buscar ella sola la habitación de Alex , pero tal vez sería más fácil dejar que todos pensaran que era su esposa. De ese modo, no los mirarían extraño, O tal vez no les importaran esas cosas... Ella llevaba tanto tiempo sin salir con nadie y sin tener sexo con nadie que ya no sabía cómo funcionaban esas cosas, sólo con pensar en ello sentía un ataque de nervios. Cielos, ¿estaría cometiendo un terrible error? Bueno, ya es demasiado tarde para pensar en eso

Piper le dio las gracias a la señorita Collins y siguió al botones hacia el ascensor escondido tras las palmeras que crecían allí mismo, en medio de la recepción. Mientras subía, Piper intentó mantener la calma, pero cuanto más se acercaban a la suite, más nerviosa estaba se preguntó si Alex estaría en su habitación, eran casi las siete de la tarde tal vez estuviera cenando...., tragó saliva al pensar por primera vez en la horrible posibilidad de que quizás estuviera con otra persona, otra mujer compartiendo su cena o incluso habitación.

—Oh, no...Susurro. ¿Qué haría si ése fuera el caso? ¿Era demasiado tarde para darse la vuelta y volver a casa? Sus pensamientos la pusieron aún más nerviosa, sobre todo el ridículo que haría si Alex estaba ya con otra compañía.....

Aún seguía debatiendo consigo misma, ¿y si Alex no estuviera sola?, cuando el botones se detuvo en una puerta. —Ya hemos llegado señora Vause, la suite Calipso. Y al decirlo, llamó a la puerta con los nudillos.

Piper murmuró una oración pidiendo casi suplicando que Alex estuviera sola antes de que la puerta se abriera.

—¿Piper?. Alex murmuro asombrada al verla parada al lado del botones.

—Hola Alex ¿por qué ella no sonreía? El corazón le latía tan aprisa que empezaba a asustarse.

Y justo en el momento cuando iba a pedir perdón por su horrible error, ella le hizo un gesto al botones para que pasara y dejarla las maletas, mientras Alex le daba una propina, Piper se preguntó a sí misma si no sería demasiado tarde, Alex aun no sabía que tenía condiciones para estará ahí, y si no aceptaba quizás cambiaba de idea y ya no quisiera tenerla allí, podía marcharse y lo haría. Alex cerró la puerta después de despedirse del botones y por fin la miró.