Capítulo 6

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Resultó que el chico de la caída decía llamarse Kim Namjoon, y al igual que Seokjin, era un estudiante extranjero, procedente de Corea.

Después de su momento de romanticismo barato, Seokjin no volvió a hablarle, incluso después de enterarse que eran compañeros de cuarto, como si su trama interior de vida americana no fuera suficiente ya.

Tal vez Namjoon sintió su frialdad o su poca amabilidad, porque había tomado la habitación contraria a la de él, acción que Seokjin agradeció, ya que no le gustaría compartir cuarto con el chico después de su torpe escena.

Y no fue para más, resultó que el muchacho era alguien completamente silencioso, y que por los dos días que habitaron en el mismo espacio no se habían visto la cara, el moreno había permanecido aislado en su habitación, con las puertas cerradas y la música a un volumen aceptable.

Seokjin había notado que el chico no salía más que para los horarios de comida, en donde se sentaban en extremos contrarios de la habitación. 

No le molestaba, todo el caos llegó cuando el campus inició a cobrar vida y los estudiantes comenzaron a llegar, dando como resultado la gran pelea que se desarrollaba en su pequeña sala de estar.

El recién llegado Mark, a como se había presentado ante Seokjin, un americano con rasgos medio asiáticos que Seokjin no sabía identificar muy bien, había decidido que sería su compañero de cuarto desde ese día.

Seokjin no tenía ningún problema, la razón del conflicto era Jackson, un rubio musculoso que le miraba con ojitos suplicante desde la puerta del pequeño departamento. 

Como resultado de su mala suerte, el chico que le hizo compañía durante la fiesta de año nuevo, resultó ser el cuarto inquilino, como si la vida de Seokjin no fuese ya lo suficientemente mala.

El chico moreno, Namjoon, miraba todo desde la puerta de su habitación, Seokjin no sabía qué hacer, hasta que el moreno, harto de la situación, les interrumpió a los dos chicos problemáticos.

–Oigan, no les conozco y solo quiero decirles que lamento que la vida nos haya puesto junt…, como sea, compartiremos espacio por varios años, si nos va bien, así que deberíamos llevar esto con calma, ¿Por qué no dejamos mejor que aquí nuestro amigo decida quién debería ser su compañero?– Seokjin pensó que el chico Namjoon sabía cómo manejar una situación sin perder la calma, se imaginó cómo sería tener una serenidad así, pero no pudo lograrlo, estaba a punto de perder los estribos.

Jackson estaba en una esquina como cachorro regañado y Mark le miraba furioso para luego rodar los ojos.

–Puedes ser tú ¿Mark?– dijo para finalizar la contienda.

Mark miró a Jackson, señalando con sus palmas abiertas a Seokjin y haciendo muecas de cansancio.

¿Ves?– le presumió – ahora deja de monopolizar mis cosas antes de que corte tus pelotas.

Jackson hizo un nuevo berrinche, Namjoon, quien parecía amante de mantener todo bajo control, fue hasta donde el rubio, estrechando su mano y comenzando una amena conversación, hasta que minutos después, el rubio parecía no recordar el motivo de su falsa tristeza.

Conforme la semana de descanso que tenían antes del inicio de clases transcurrió, Seokjin pudo percatarse del ligero vínculo que sus vecinos estaban creando, pensó que compartían muchas cosas en común, iniciando con que ambos estaban inscritos en la misma carrera, el resultado de que Jackson y Namjoon compartieran habitación fue más desastroso que bueno.

La música resonaba más fuerte y permanecía hasta altas horas de la noche, a Seokjin no le molestaba, las melodías llenaban los silencios pesados, pero para Mark era todo lo contrario, solía levantarse de su cama y golpear la puerta hasta que alguno de los dos, generalmente Jackson, salía y le gritaba en la cara que los dejara tranquilos, luego Namjoon bajaría el volumen y Mark pasaría la siguiente hora hablando para sí mismo de lo horrible que era vivir con Jackson.

MEMORIES OF US | NAMJIN | MARKSON | ESPECIALOnde histórias criam vida. Descubra agora