HOPE ©

Lágrimas de Cocodrilo

El mundo está en las manos de aquellos que tienen el coraje de soñar y correr el riesgo de vivir sus sueños - Paulo Coelho.

Llamé a Bruce, le dije que Viniera a Traerme, por un pequeño momento, pensé en lo que dijo Alexei, y me siento culpable- pero no arrepentida - pero lo haría mil veces más.

La amistad de Alexei era muy importante para mi, nos conocemos desde niños, sabe todo sobre mi, menos mi talla de ropa claro está. A pesar de sentirme culpable, ni una lágrima salía de mi ojo, talvez Alexei estaba en lo cierto, estoy viva por dentro pero podrida por fuera. Alguien se acerca y lo único que hice fue sacar una navaja pegada a mi muslo.

- Tranquila! Soy yo Brune.. - musitó este poniendo sus manos arriba.

- Lárgate Jordani - hablé quitando la navaja de su cuello.

- Mal rato? - preguntó este con una risita.

- Mas o menos, pero contigo esa pregunta no es válida.

- Se a que te refieres Smirnov, por cierto que haces acá? - dijo colocando su mano en su Barbilla.

- Acaso importa?

- Tu plan no salió como querías.

- Quien lo dice? Alexei no se casó con Amara. - dije de brazos cruzados.

- Alexei está molesto contigo, acaso no le dijiste el porqué lo hiciste? - preguntó en tono dudoso.

- No, sé que es tu amigo, eres tan hijo de puta, te metiste con su prometida, ni se que te vió Amara, es mejor Alexei, Talvez estaba finjiendo.

- En serio? acaso no escuchaste sus gemidos? Bueno para ti fué imposible no hacerlo porque nos viste, a Amara, a mi y a mi amigote. - Exclamó Brune soltando una carcajada.

Bruce había llegado, sin dudarlo me subí al auto.

- Smirnov! - gritó este - No le digas a Alexei que fuí yo.

- Conduce - le dije a Bruce ignorando a Brune.

Llamé a Oliver, le pregunté si había llegado a salvo, y el dijo que si, la verdad me preocupo por Oliver, y mucho, creo que el es mi debilidad y eso me aterra, tengo miedo de que le hagan daño, ese miedo es el más mortal de todos.

<<Si te enamoras te llevará la mierda y ella te recibirá con los brazos abiertos>>

Ese temor, lo tenía por un desconocido que había conocido hace 4 días, que tenía él? jamás sentí algo por alguien.

- Bruce cambia la dirección, primero iré a la casa de Evans. - ordené a Bruce y mordiendome la lengua por haber pedido eso.

Acaso estoy enferma? bueno creo que es algo pasajero, pero a dónde se había ido la cruel Hope? se había quedado en casa tejiendo?.No había estado manejado mis emociones estos últimos días como antes, antes no me sentía culpable, llevo una vida monótona, aburrida, pero es lo que yo deseo, y yo quiero lo que tengo, es mejor estar así, alejado de los sentimientos humanos, pero esos sentimientos humanos estaban atacandome como nunca.

Desde pequeña me aseguré de crear un muro alrededor de mi corazón para que nadie pudiese entrar y pisotear mi corazón, siempre evadí los sentimientos de amor, y además no tenía tiempo para no evadirlos. A los catorce mi padre se encargó te entrenarme, haciéndome como un robot sin sentimientos, con una orden predestinada y con un destino predestinado, alguien quien jamás dudaría en jalar el gatillo, alguien quien podría ver a su víctima suplicar y sentir satisfacción. Por eso tengo cierto rencor a Iván, jamás buscó al asesino de mamá, solo lo hizo por 3 años pero luego se rindió, algo cobarde y patético de su parte, y también porque me hizo la mujer que soy.

- Llegamos - avisó Bruce.

Bajé del auto, quería entrar, pero no pude, solo pude pararme enfrente de la entrada con el vestido rojo y con los tacones que tanto odiaba por la incomodidad que estos me daban.

Regresé al auto y le dije a Bruce que me llevara a casa.

(...)

Cuando llegué a casa solo tomé las llaves de mi auto, no quise quitarme este vestido con espalda descubierta ni los tacones.

Tomé mi teléfono he hice una llamada a Pushkin.

- Puskin?

- Señora Smirnov - dijo mi guardaespaldas.

- Necesito que me averigues en que bar está el Señor Alexei.. pero ahora! - ordené a este.

- Estuvo un momento en silencio - Jefa, el señor está en El Bar "Noches Rusas"

Colgué la llamada y me dirigí a ese bar de malamuerte.

Sostuve mi volante con más fuerza y aceleré más, estaba asustada, no quería que le pasara algo a Alexei, porque si no, que pensaría Oliver de mi?

<<Hope, desde cuando te importa lo que piensen de ti?>>

Llegué a ese bar, cuando entré vi a muchos hombres en mesas de apostar, mujeres en poca ropa y dándose ver lo baratas que eran.
Me dirigí hacia la de recepción.

- Desea algo?

- En dónde está Alexei? - pregunté Ignorando la pregunta de la rubia.

- Habitación 15, espacio VIP.

Sabía todo de ese bar de malamuerte, gracias a Sergei, el siempre estaba aquí de conejito con las zorras de aquí. Cuando subí vi a señores enfermos de 50 años entrando a las habitaciones con jóvenes de 20, me costó llegar a esa habitación.

No me dí la molestia de tocar la puerta, afortunadamente no estaban desnudos, solo estaba la chica besandose con Alexei y tocando su parte.

<<Esto me empalaga>>

- Lárgate - dije jalando del pelo a la rubia y llevándola a la salida esta chilló y le cerré la puerta en la cara.

- Hope! Siempre sorprendiendo con tus entradas! Porqué no vienes con un Hombre?

- No es tu problema  - interrumpí intentando levantarlo.

-  Eres hermosa Hope - dijo acercándome a el  y caí en su pecho, huele a ebrio - y eso te hace peligrosa, porque eres hermosa por fuera pero horrible por dentro - dijo acariciando mi cabello y soltando Lágrimas de cocodrilo.

- Idiota - susurré dandole un golpe en su pecho.

Lo pude sostener y lo levanté, aguantando su apestoso aliento a alcohol. La recepcionista me dió la cuenta,¿Cuánto bebió este idiota para que la cuenta sea de 20,000 dólares? Me las pagarás Alexei.

(...)

Llegamos a su casa, es tan pesado, no creo que un mamut pese más que él. El idiota vomitó en mi auto, y en su ropa, le cambié su ropa y me eché en el sofá a descansar, el duerme como un bebé.

Le dejé una nota escrita cuando decidí irme.

Ahora me debes 4,020,000 millones de dólares, dejé desayuno para cuando despiertes, y lamento lo de tu boda.       
                           De : Hope S.

Salí de allí y conduje en mi auto con rapidez.
Abrí la puerta de entrada de mi hogar con gran decepción, nadie estaría Allí. Siento unos brazos rodeandome, por su aroma es Oliver.. pero que hace aquí? Talvez solo sea un sueño aunque desearía que fuera realidad así que decidí corresponder a su abrazo y solo recuerdo que caí en sus brazos, con mi mirada borrosa por el gran sueño que cargaba en mi. Solo tenía ganas de Dormir eternamente, me embriague con tal espectacular aroma. Sólo me desvanecí.