Capítulo 8

487 68 7
                                    

Tres días más habían transcurrido con la presencia de Yoongi en su casa, y no podía evitar sentirse extraño.

Estaba feliz de conocerlo y de que compartiera momentos con su hijo, después de todo eran familia. Sus suegros estaban asistiendo a terapia y aunque sus padres llamaban seguido, permanecían en Busan.

Para su suerte, Taehyung y Hoseok siempre estaban para ayudar, y ahora se sumaba Yoongi.

Un alfa extraño, que ocultaba su aroma y de verlo parecía omega, pero que por alguna razón le atraía.

Dicha atracción le hacía sentir enfermo, no podía pasarle algo así con el hermano de su alfa fallecido... No con el tío de su cachorro.

Jimin sabía que Jungkook y Yoongi en realidad no eran hermanos de sangre, pero habían crecido juntos y se llevaban tan bien que realmente se sentía así.

Por más que el pelinegro siempre nombraba a Yoongi como "Yoongi hyung" o solo "hyung", también se refería a él como "mi amigo". Sin embargo, Jimin siempre los vió como hermanos.

Era preocupante lo que sentía. Ver a Yoongi alimentando a su hijo le hacía mucho bien. Se sentía completamente diferente a cuando estaba Taehyung, pues él es un omega, y el peliverde estaba cumpliendo el rol de un padre alfa...

Jimin sentía que estaba volviéndose loco, los sentimientos en su interior no eran apropiados en la dirección que avanzaban. Jimin ultimamente cocinaba para dos, incluso hacia postre, había soñado que el mayor se mudaba con él, y navegando en internet, vió muchas cosas que, según él, tal vez le gustarían a Hyung. Quería saber más sobre él, gustos, planes, su trabajo, verlo reír en confianza, beber juntos... Cada vez que se iba tenía el impulso de pedirle que se quedara.

Pero estaba mal.

Terminó de fregar y fué a la sala, encontrándose con Yoongi dormido en el sofá, con los dedos entrelazados sobre el abultado pañal de su bebé, que estaba sobre él, también dormido.

Mientras lavaba había pensado que lo que sentía estaba mal, que no debía poner ese tipo de atención en Yoongi, pero a pesar de que estaban mal, esos sentimientos lo hacían sentir bien... Y por lo tanto permanecía confundido.

No sabía que debía hacer con exactitud. Observó a los bellos durmientes en su sofá, y se veían preciosos, pero estaba haciendo frío y lo mejor era taparlos con una manta y encender la calefacción.

No sin antes tomar una foto, se dirigió a su habitación en busca de una manta, los tapó a ambos y sintió el timbre sonar.

- Oh, Tae, ¿te sientes mejor? -abrazó a su amigo y le dejó pasar.

- Si, fué un celo difícil pero ya está pasan... do. ¿Me puedes explicar que hace ese tipo aquí y con Jungkook? -cuestionó enojado- Me voy cuatro días y ¿¡dejas entrar a tu acosador a tu casa y a tu vida!? ¿¡Qué demonios te pasa Jimin!?

- ¡Ssssh! ¡Tae, los despertarás! -susurró alarmado- hablemos en la habitación.

Arrastró a Taehyung, quien echaba humo del enojo, hasta su cuarto y cerró la puerta.

- Ven, siéntate.

- No. Explícate. -exigió Tae, enojado.

- Está bien, de acuerdo. -suspiró- ¿Sabes que Jungkook tiene un medio hermano cierto?

- Si, continúa.

- En realidad, quien está durmiendo en mi sofá no es un acosador, es su hermano que no sabía cómo acercarse a nosotros...

- Ajam, si claro, cuéntate otro.

- ¡No es un chiste Taehyung! El día que llegó tu celo, fui al supermercado a comprar pañales y sentí que me seguían, pensé que era él pero...

- ¿Era un fantasma?

- ¡Taehyung! -lo calló- Era otra persona, un hombre, alto, un poco gordo y de barba.

- ¿De verdad? ¿Cómo sabes que te seguía? -cuestionó curioso.

- Bueno, cuando me giré a ver no había nadie. Lo supe porque Yoongi Hyung venía detrás y lo golpeó. El maldito se escondía detrás de una columna. Si no fuera por Hyung...

- "Si no fuera por Hyung". ¿Tan cercanos son ya, como para decirle Hyung?

- Es mayor que yo, Tae, y sería irrespetuoso llamarlo solo por su nombre...

- ¿Estás seguro que no hay algo más?

- ¿Pero que estás diciendo..?

- ¿Por qué no respondes, Jimin? -insistió.

- Es una locura Tae...

- ¿Acaso hay algo más entre tú y tu hyung? -lo presionó.

- ¡No digas tonterías! ¡Nunca sentiría algo romántico por él! Ni siquiera parece alfa, es flacucho y tan pequeño como yo, es el hermano de Jungkook, tío de mi cachorro, oculta su aroma y... -hizo una pausa- ¿Qué pensaría Jungkook si supiera que hace eso?

- Está bien, entiendo. Me alegra que lo hayas conocido al fin, aunque casi nos mata del susto.

- A mí me alegra haberlo conocido, y que esté en contacto con Jungkook, será  bueno que sea cercano a su tío. -continuó Jimin.

- Por un momento me asusté, creí que tal vez tú tenías sentimientos por él y pensé "es una locura que el Chim se una al hermano de su alfa muerto, ¿Cómo le diría el pequeño Jungkook? ¿Papá o tío?"

En ese momento, Jimin sintió agujas clavarse dolorosamente en su corazón, porque aunque le costara admitirlo, esos cuatro días de conocerlo habían bastado para caer por él. Se sentía muy culpable por todo, por lo rápido que había desarrollado sentimientos amorosos, por ver a esa persona como otra figura paterna para su cachorro, por que esa persona sea en realidad su cuñado, y sobre todo, por estar superando a Jungkook tan rápidamente.

Las lágrimas inundaron sus ojos y cayeron silenciosas, hasta que no pudo contener los hipidos y lloró como un bebé.

- Te gusta ¿Cierto? -habló Tae, Jimin asintió- Lo sabía, no puede ser que siempre tenga que presionarte para que me cuentes las cosas. -se quejó.

- Siento que estoy cambiando a Jungkook por su hermano, Tae... No quiero estos sentimientos...

- Oh Jimin... -se sentó a su lado y lo abrazó- Sabes que no puedes controlar las cosas del corazón.

- Pues mi corazón es un idiota.. -se quejó.

- No digas tonterías Jimin. Y tal vez esto suene mal pero, si ocurriera algo entre ustedes, al menos Jungkook sabría que tú y su cachorro están en buenas manos, ¿No crees?

Entonces se escuchó el ruido de la puerta principal, y Taehyung salió disparado a la sala, preocupado por Jungkook. Sin embargo, al llegar allí, lo vió dormir con tranquilidad en el sofá, donde había un almohadón que impediría su caída si es que se movía o despertaba, y la manta lo cubría del frío.

- Tal vez no sea tan malo... -murmuró el castaño.

- No lo es. -agregó el rubio.

🐯

Hasta aquí por hoy 😊

Gab.-

Romero & Menta [KM/YM] (omegaverse)Nơi câu chuyện tồn tại. Hãy khám phá bây giờ