Los Orígenes 👑 | LIBRO 1 - TO | ✔

👑 Capítulo 9: "Asegurando la descendencia"

👑Capítulo 9 👑

Mikael y padre ya habían encontrado un hogar para Elijah y yo. Volveríamos a la vieja cabaña. No me gustaba la idea, pero no iba a negar que fuera una casa con encanto.

Ethan, Aidan, Kol y Finn nos ayudaron a llevar todas nuestras cosas. En mi caso, no tenía muchas cosas: los mismos cinco vestidos de siempre, un viejo peine, un espejo sin marco y mi nombre tallado en un trozo de madera.

-Ingrid pasó hace un rato.-comentó Elijah, mirando por la ventana.-Dejó algo de comida.-

-Oh...genial.-revisé la canasta y solo había algo de queso y una hogaza de pan.- Prepararé la cena.-murmuré, atándome el cabello.- ¿Qué se te apetece?-

-Nada complicado.-respondió.-Solo algo ligero.-

Al ser la primera noche que pasábamos como casados, no tenía la más mínima idea de que hacer. En casa de Esther comíamos estofado, pero era algo complicado y escaseaba de los ingredientes pedidos. Y para ser sincera, no era tan buena cocinando como Ingrid o mi madre, así que me la ingenié para hacer lo que tenía a mi alcance.

-Lamento esto.-murmuré, sirviéndole una sopa de verduras, un poco de avena y algo de queso.-No soy de preparar esto, solo qué...-

-No hace falta que digas nada.-Elijah sonrió de lado, aceptando su cuenco. Se lo llevó al rostro y aspiro el humito que salía.- Huele delicioso.-

-Espero que sepa igual.-me mordí el labio, sentándome frente a él.

-¿Por qué tan lejos?-preguntó, corriendo la silla que estaba a su lado.-Ven.-asentí levemente y moví todo hacia un costado.- Rebekah mencionó lo que pasó en la plaza.-comentó, cortando un poco de pan.- ¿Estás bien?-

-Lo estoy.-respondí, jugueteando con la cuchara por encima de la avena.

-Escuche de mi padre que Artem se hizo cargo de la situación.-añadió.

-De eso no sé nada.-

-No pasó mucho.-continuó.-Solo dialogaron. Creo que llegaron a un acuerdo o algo así.-

-¿Acuerdo?-repetí dejando de lado mi cuenco.

-Ni Brends ni su manada se acercarán a nuestra zona.-respondió.

-¿Se sintieron amenazados o algo?-quise saber.

-Al parecer un leñador excedió los límites acordados hace años.-

-Ah...-murmuré, recostándome sobre el asiento.- Es bueno saber que estamos a salvo, ahora.-solté una risa nerviosa.

-Mi padre cree que no es bueno que haya lobos rondando por nuestros alrededores cuando hay niños.-comentó.-Teme por sus futuros nietos.-si hubiese comiendo algo, me hubiera ahogado.

-¿Nietos?-repetí, repiqueteando los dedos.

-Está emocionado y a la espera de que le digamos que le daremos nietos.-añadió.-De hecho, mi madre vendrá mañana para hablar contigo.-

-¿Sobre qué?-quise saber, corriendo el cuenco.

Se encogió de hombros.

-No tengo idea.-

Respiré hondo y me mordisquee una uña. Si mal no recuerdo, un año atrás, antes del nacimiento de Alexandra, mi madre había hecho llamar a Ayanna para una revisión sobre Ingrid. Ambas familias querían asegurarse de que hubiese descendencia.

Si mal no me equivocaba, Esther quería asegurarse de que yo tuviese hijos.

*.*.*

En cuanto llegó la mañana, me levanté antes que Elijah y me dediqué a preparar el desayuno.