Capítulo 2

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Llegamos a la fiesta, era un lugar lejano de Brooks, como una especie de construcción abandonada, tenía dos pisos, estacionamos muy lejos de la entrada.

El lugar no tenía puertas, y algunas personas estaban llegando.

Al entrar, todo estaba iluminado por pequeñas lámparas con luces de colores, parecen recicladas de la navidad pasada.

Estaba lleno de personas caminando de un lado a otro, bailando y disfrutando.

Descubrí que el atuendo que usaba no era adecuado para la fiesta, era una blusa negra y unos jeans, los demás vestían con chaquetas, vestidos, o blusas escotadas.

Igual no me importó.

La música era muy buena, habían juegos de bebidas, miré por la puerta de afuera había un pequeño jardín donde estaban jugando póker y apostando.

Las fiestas de secundaria a las que fui, eran nada comparada con esto, nos dirigimos a la mesa de bebidas.

- Aún no lo creo - dijo Kris - ¿Rechazaste al chico más deseado de Brooks, por venir con nosotros?

- El más descarado querrás decir - dije enojada-¿Viste como se me acercó?

- Chicas, es una fiesta - nos interrumpió Calum - Olviden eso.

Christian sirvió los vasos de cerveza, pero negué con la cabeza cuando me ofreció el mío.

- ¿Qué sucede? - preguntó Christian.

- No suelo beber y no quieren verme borracha - les advertí.

- Si lo dices más alto intentarán embriagarte, créeme conocemos a estas personas - me advirtió Kris.

- Uno no hará daño - insistió Calum.

Bueno, tenía razón.

- Solo uno - acepté el vaso con una sonrisa.

Bebí un sorbo.

En ese momento, volteé y los Darko habían llegado.

Su llegada pareció cámara lenta, entraron y la mayoría se acercaron, Ioan como siempre su expresión seria y su hermano manteniendo sus distancias, aunque muchos se acercaron a saludar.

Tenía claro que también vendrían, pero me impresiona que solo con su presencia ya son el centro de atención.

- ¿Dónde está Kate? - preguntó Kris al no verla con ellos.

Cuando la buscamos con la mirada, se veía muy atrás de los Darko,  se dirigió a la mesa y después de servir su vaso y tomarlo de un trago, luego nos miró.

- No pregunten - dijo Kate enojada.

Creo que no le funcionó salir con ellos.

- Entonces... ¿Por qué brindamos? - preguntó Calum cambiando de tema.

- Por la iniciación de Emily... - dijo Christian.

- Y... porque ya es parte de nuestro grupo - completó Kris con una sonrisa.

Me pareció un buen motivo.

Sonreí.

- ¡Salud! - dijimos todos al unísono chocando los vasos.

Ese fue mi segundo error.

Cuatro vasos y varias idas detrás de los arbustos para hacer pipí más tarde...

Estábamos bailando, ya había jugado algo parecido a "Beer Bong" con las chicas,  les gané, no sabía que era buena metiendo pelotas de ping pong a un vaso.

Decisiones Peligrosas©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora