ONE SHOT - OFF ROAD

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ACLARACIONES: ESTÁ HISTORIA FUE REALIZADA ANTES DE QUE SE DIERA A CONOCER QUE GUSTABO Y CONWAY ERAN FAMILIA. ASÍ QUE EVITAR COMENTARIOS TÓXICOS.

¿Alguna vez ha deseado vivir otra vida? ¿O tener una segunda oportunidad? Una en la cual nada malo y estar con las personas que más amas

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¿Alguna vez ha deseado vivir otra vida? ¿O tener una segunda oportunidad? Una en la cual nada malo y estar con las personas que más amas. Un lugar donde nadie puede tocar y puedes hacer lo que tus deseos más profundos anheles.

Ese era su objetivo, comprar en una casa en la Bahía de Paleto, lejos del pueblo, cerca de las montañas, disfrutando del aire limpio y fresco de los árboles. Él y su hermano, experimentaron de cero. Solo ellos dos, Joe trabajaba de buzo en la costa y James bueno, se las apañaba.

Aún no conocían toda la ciudad, pero desde el primer día entablaron amistades con Rubén, el tío era muy majo les había sacado de varios líos con la policía además de cuidarles. Eran el trío perfecto.

La campana de la tienda sonó, y James entró secándose el agua de la lluvia.

El sujeto detrás del mostrador, ni le miro. James camino entre los mostradores y tomó lo primero que encontró. Pagó y salió comenzando a comer. La lluvia ligera caía sobre su rostro. Esto era lo que buscaba. Tranquilidad y paz.

O eso hasta que un auto desconocido se paró frente suyo. La ventanilla del auto se bajó y rápidamente reconoció a la persona dentro de este.

- ¿Joe?

- ¡James, sube al coche! - variable el de cresta sonreía. Mientras daba pequeños saltos en el asiento.

El rubio abrió la puerta del copiloto y se subió. - ¿Lo ha robado?

Joel asintió - ¡Si tío! Estaba en garaje y un tío calvo comenzó a vacilarme y le golpeé en la cara y le robé el coche- contó riendo.

El de cresta bailaba mientras conducía mientras James reía. - Tío deja de bailar que nos vamos a estampar. - dijo sin sonar serio.

- ¡Siéntelo James, báilatelo! - exclamo girando el auto. Dirigiéndose a la montaña, en dirección a su vivienda.

La pequeña cabaña se vio a lo lejos, John estacionó el auto robado y los dos bajaron. James se quitó la chamarra mojada y la estrategia al suelo. Camino hasta el sofá y se encuentra sobre este.

Miró hacia la chimenea apagada, ni siquiera tuvieron que comprar un televisor, su único entretenimiento era salir a la calle y robar algo a los ciudadanos, que aún no los conocían del todo.

-James, podemos ir a la ciudad en la noche- Joe se asomó por el respaldo del sofá-Que hay una fiesta en el tequila esta noche y Rubén tiene entradas.

El de ojos azules miró los ojos suplicantes de su compañero. Ir a la ciudad era un peligro, desde que llegaron no hubo pisado la ciudad. El alcalde intentó negarle la idea, pero Joe formó un puchero y no pudo negarse.

REBORNPLAY & INTENABO AUDonde viven las historias. Descúbrelo ahora