interstellar ✰ albus potter.

─ fifteen ✰ to love somebody

NOTA DE LA AUTORA;

¡hola! vaya, dos meses sin vernos ): lo siento muchísimo. pero por eso les traigo un capítulo SÚPER HÍPER MEGA LARGO, lean este capítulo con mucha atención. está ENTERAMENTE desde la perspectiva de albus y podrán conocer mucho más sobre su comportamiento, su relación con su familia y demás. este capítulo es muy importante, a mi parecer. suceden muchísimas cosas, el final les va a ENCANTAR de eso estoy segura. antes de empezar el capítulo: LEAN LA NOTA DEL FINAL AL TERMINAR. ustedes saben que siempre explico muchísimas cosas que suceden y esta será muy importante para profundizar más el capítulo. sin más, ¡espero que lo disfruten y comenten mucho! <3

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FIFTEEN: TO LOVE SOMEBODY
interstellar — vol. ii

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ES UN ALGENTE DÍA, EL SUELO ESTÁ CUBIERTO POR UNA GRUESA CAPA de nieve, un viento gélido sopla moviendo las ramas de los desnudos árboles en donde cuelgan algunos carámbanos de hielo, y el sol ni siquiera es visible bajo las espesas nubes cubriéndolo.

Albus Severus Potter sabe con certeza que ya está en vacaciones de invierno por dos cosas principalmente: el clima maravilloso, y los gritos de James Sirius los cuales pueden escucharse desde su habitación aún cuando ésta queda en el último piso de la casa.

Están en la tercera semana de diciembre y Albus aún no comprende cómo no ha enloquecido en todos estos días. El azabache suelta un suspiro y cierra los ojos con fuerza frunciendo el ceño cuando uno de los gritos incomprensibles de James entra en su campo auditivo. Albus pasa una mano por su rostro y abre los ojos de a poco, tratando de no verse encandilado por la luz.

El Potter suelta un exhalo profundo y se acomoda en su cama, estirando sus brazos en un intento de desperezarse y plasmando una pequeña mueca en su rostro cuando escucha el fuerte sonido que producen. Su vista esmeralda recae en el despertador a su lado y al ver la hora, éste frunce el ceño con un deje de preocupación (y un poco de irritación); la pantalla digital emite un 8:40 AM y Albus suspira sin poder evitarlo, solo ha dormido cerca de ¿qué? ¿Dos horas y media? Su horario de sueño está más estropeado de lo usual.

El ojiverde frunce su nariz y se incorpora en la cama, pegando su espalda en contra del ventanal (sí, él no cuenta exactamente con una cabecera) y sintiendo la irritación emanar de su cuerpo cuando los gritos de James se escuchan cada vez más ruidosos. Albus sostiene el puente de su nariz en un intento de dotarse de paciencia, va a volverse loco y a matar a James.

Albus truena su cuello y remoja sus labios, las esmeraldas que tiene por ojos escanean la habitación. Su habitación no es precisamente muy común, realmente es el ático de la casa; decidió redecorar el ático y convertirlo en su habitación a partir de su Cuarto Año (tuvo que discutir mucho con sus padres para que lo dejaran hacerlo, finalmente fue Teddy quien pudo convencerlos y por eso Albus piensa que Teddy es la persona más genial que ha conocido en toda su vida).

El ático es amplio, increíblemente amplio, de hecho, su habitación es la más grande de toda la casa. Hay un enorme ventanal que da hacia las afueras de su casa y Albus puede observar a lo lejos, sin problema alguno, el vecindario del Valle de Godric. Su cama está en todo el centro de la habitación casi que literalmente en el suelo si no fuera por las estibas de madera en las que está colocado el colchón, y cuenta sin una cabecera; por el contrario, está apoyada en contra del gran ventanal que Albus usualmente cubre con persianas oscuras (sin embargo, justamente esta vez lo ha olvidado, increíble).