Quizás sí , quizás no...

Parte 31- Parejas

Me sentía realmente cómodo sintiendo el cuerpo de Dulce a mi lado, no pude evitar rosar mi pierna con su pie, cosa que hizo que se sobresaltada, pero no me dijo nada, solo me sonrió, mi celular había estado sonando y sabía quien era, no quería que una pelea arruinara mi humor en estos momentos

- Christopher contesta o ponlo en silencio- había dicho Chris sin despegar sus ojos de la televisión

- Perdón- susurre tomando el celular leyendo los mensajes y puse el celular en silencio boca abajo, en un momento Christian se paro y fue al baño dejándonos solos, tome mi cara en mis manos

- ¿todo bien? - susurro ella, saque mis manos de mi rosto para verla

- Si, es Muriel, últimamente está muy insegura, muy intensa, demasiado encima de mí

- Entiendo... bueno supongo que es normal- ella bajo la mirada- digo no debe ser agradable que tu novio viaje con la persona que ...

- Dul, no pienses eso, ya te dije que eso fue algo que se dio, ambos lo quisimos, somos adultos, no puedo culparte y decirte que si fuiste tú quien se me metió por los ojos, sería injusto

- Ya, pero ella no lo ve así , es normal es mujer yo estaría peor quizá, lo peor es que como puede ponerse así por mí, soy todo menos una amenaza para ella

- No te hacía tan insegura, y si puedes ser una amenaza

- Pero ella es

- Es linda si, pero tu también, cada una a su estilo – suspire- tengo un caos acá- dije señalando mi cabeza, sabía que era injusto poner a Dulce en esta situación- en fin, ¿y que tal con Pablo? – pregunte serio, realmente no quería saber la respuesta, pero era inevitable, quería saber si eso iba realmente en serio

- Bien- susurro, en ese momento salió Christian del baño

- Bueno pollitos, como que hace sueño eh – viendo su reloj- fue un día largo, me debería ir

- Bueno – no sabía que decir, no quería dejar a Dulce, pero sabía que ella estaba incomoda- vamos

- ¿seguro? porque puedes quedarte, si a Dul no le importa

- Es mejor que duerma, tenemos un día largo mañana

- Si es verdad- dijo ella mirándonos con ojos somnolientos

Christian y yo salimos de la habitación, eran la 1 de la mañana y yo aún no tenía sueño, entramos a nuestro dormitorio, Christian entro al baño para poderse lavar los dientes mientras que yo fui al balcón, ahí había unas sillas con una pequeña mesa, realmente me sentía confundido, con un caos, no sabía si realmente lo que sentía por Dulce era un sentimiento más allá de pasión/ deseo, porque realmente si la deseaba, los momentos que habíamos pasado juntos me habían marcado. Por otro lado estaba Muriel, ella había compartido muchas cosas conmigo, había sido un soporte, aunque teníamos muchas cosas en las cuales no coincidíamos habíamos hecho una buena química, sabía que no era la persona favorita para mi familia, pero al final era problema mío, pero últimamente, sus actitudes me enojaban, la entendía, quiero decir, a pesar que no tenía ninguna prueba para afirmar que entre Dulce y yo había pasado algo, sabía que desde el día que la vio no le había caído nada bien.

Muriel no era mala, pero era una persona especial, y realmente la quería, pero ¿realmente era suficiente el cariño que le tenía?

Al día siguiente a las 7:30 de la mañana todos nos encontrábamos en el restaurante del hotel, desayunando, era un buffet bastante surtido, me sentía feliz y relejada, el no tener que preocuparme por nada, solo pararme servirme y comer.