Médula

303 52 13
                                    

Jueves, 5:20PM.

Al igual que ayer me mantuve todo el día pensando, quería visitar a Moon más tarde, alrededor de las 7 o 8 de la noche, pero me intriga saber cómo está... De hecho, por mí hubiera venido más temprano, sin embargo hoy terminamos de pintar la fachada durante toda la tarde, y tampoco quiero parecer fastidiosa, así que hasta ahora tengo algo de tiempo.

Siento algo de ansiedad entre cada paso que doy, llevo algunos panes de Hwangnam, a mí me gustan mucho, voy con esperanza de que a ella también. Muevo la caja de un lado a otro intentando sacar algo de ansiedad de mí.

El señor de los periódicos me ha sonreído, parece que va a hablar:

— Hey, perdona la indiscreción pero... Hace unos días me preguntaste por un hospital.
— Ah, sí. Muchas gracias por la información.
— No es eso, supongo que la chica de la noticia es alguien cercano.
— Sí, lo es...
— ¿Cómo sigue ella?
— Está mejor. Justo voy a verla.
— Oh que bien. Ojalá mejore pronto y pueda conocerla.

Sonrío pero no digo nada más. Me despido y sigo caminando.
No sé que pensar o contestar. ¿Dónde están sus papás?

Llego al portón y toco el último timbre.

Nadie se asoma, no hay ni siquiera ruido.
Que extraño. ¿Habrá salido? ¿A dónde?

Pasaron unos minutos, volví a tocar el timbre, pero otra vez nada.

Quizá simplemente está intentando dormir o se está duchando, lo más adecuado sería irme... Pero mi intuición me dice que no lo haga; Algo dentro de mí me asegura que está aquí. Ojalá pudiera entrar al condominio para tocar su puerta.

Han pasado 15 minutos desde que llegué. Sólo tengo algunas miradas curiosas de los vecinos de que estoy parada aquí sin hacer nada.

La primera vez que vine ella contestó mi llamada. Marco a su número sin espacio a duda.

Enlazando... Llamada rechazada.

¿Por qué me colgaría? ¿Hice algo malo...?
Quizá está enojada por qué no le puse su venda. No... Ella no se enojaría por algo así, o eso supongo. Es una persona muy sencilla.
¿Por qué colgó?

Rápidamente escribo:

— ¿Hola? Byul, estoy tocando el timbre... ¿Podrías abrir? O si no quieres verme solo dime, te dejaré una caja para que salgas cuando me haya ido...

Acabo de enviar el mensaje. A penas le llega le aparece como leído.

Estoy apenada y confundida, ¿qué está pasando? ¿O la estoy hostigando? Quizá también podría ser eso.
Cada vez me siento peor con Byul.

No hay respuesta a su mensaje. No quiero pasar más tiempo aquí, está empezando a llover y hace frío, aunque traigo un suéter no es suficiente para soportar la lluvia con — 3°.
Volví a escribir:

— Byul, por favor sólo dime qué hacer. Tocaré otra vez, si no tienes problema con verme por favor abre, estoy muy cerca de irme porque está lloviendo.

Enviado... Leído.

Aquí vamos.
Siento pánico mientras toco por última vez el timbre. La lluvia empieza a caer desesperadamente, las gotas son gigantes y heladas. Sin más guardo mi teléfono y aprieto más fuerte la caja de pan, estoy temblando de nervios y frío.

"Por favor... Abre..." Pienso mientras siento como cae el agua de entre mi cabello, odio está sensación. Recargo la frente sobre el portón, cierro los ojos con fuerza. Definitivamente tenía que haber venido más temprano o puede que más tarde, después de la tormenta.

IljidoWhere stories live. Discover now