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Effᥱᥴto

《No trates a las personas tan mal como son, trátalas tan bien como eres》

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  El dialogo se cumplió: El francés se presentó como Jean Pierre Polnareff. 

Usted ya se encontraba de pie junto a Kakyoin cuando las llamas vaporizaron por completo la mesa, y cinco monedas fueron perfectamente  perforadas por la espada del Stand, desmostando su increíble precisión y la capacidad de corta el fuego. Joseph observó a la chica morderse el labio inferior, notando por la posición de sus hombros que algo te preocupaba, usted se inquietó ante la tenebrosa melodía que resonaba en tu cabeza conforme hablaba Polnareff, lastima que los demás no pueden oírla.  

Polnareff usó teletransportación (ni siquiera sabes cómo) y acabó en la puerta mirando hacia ustedes.

  —La carta que tiene mi Stand, The Chariot, representa  la conquista y la victoria. No me incomoda enfrentarlos en un lugar pequeño como este, pero Avdol, seguramente solo te sentirás cómodo utilizando tu llamas en un espacio mas abierto, ¿No? —Él dejó de mirar a Avdol —Sería apropiado que mi Stand te derrotara bajo esas circunstancias. Una victoria adecuada. 

Y salió.

Solucionaremos esto en la salida, resumió tu cabeza.

¿Cómo olvidar las peleas a la vieja escuela? Haha.

  —¡Todos afuera!

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ՏƬⱭƝƊ ƤRƠƲƊ

¿Omitir Opening?

No!

En esta ocasión no bailaste, lo que hiciste fue prestar a atención al vídeo en cuestión y te surgió una duda.

 En la escena de todos los personajes haciendo una fila, usted salió el, ya lo sabias, pero, ¿Cómo es posible? Ellos son edificios comparados contigo.

Una persona de 1.65 a duras pena puede ver la axila de una personaje de 1,95.

Teoría: Estas parada sobre una caja.

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FREE TIME 

5 Minutos

  Al salir del restaurante, Polnareff guió la ruta. La caminata fue relativamente silenciosa. 

Jotaro, Kakyoin y usted iban detrás del señor Joseph y Avdol, cuidando la retaguardia. Ahogaste un bostezo, te estabas quedando dormida y no piensas desmayarse en la escalera por lo que sacaste del bolsillo un trozo de chocolate dispuesta a devorarlo pero sentiste la mirada de Jotaro perforando tu cabeza, y la mano de Kakyoin en tu hombro. 

  —¿Tendrás un chocolate sabor cereza? —Preguntó Kakyoin con una amable sonrisa. Te aliviaste, usted esperaba un regaño.

  —Creo que si... —Buscaste en todos los bolsillos de tu uniforme y chaqueta.

Este Mundo Bizarro° (Jotaro x lectora)Where stories live. Discover now