13 | I

1.2K 112 291
                                    


ˏ ˋ ˎ ˊ ˗

___________________________________________

Coᥙᥒtιᥒg  Stᥲrs

La irracionalidad de una cosa no es un argumento en contra de su existencia, sino mas bien una condición de la misma.》

___________________________________________


Conforme pasaban los días, dormir era una bendición para sus agotados ojos, pesados cuerpos y fatigados cerebros tras los múltiples ataques que han recibido. Las camas de los hoteles han sido cómodas, perfectas para desahogarse y dejar la consciencia reposar, Jotaro y Kakyoin mantienen esa idea desde que compartieron habitación la primera vez por más que tuviesen que compartirla entre ellos, le daba igual.

Sin embargo, no solo cambiaban sus emociones ante una cama o la posibilidad de dormir hasta la hora estipulada sin preocuparse, también, tras ellos dos cambiaba la única integrante femenina.

Ellos recuerdan ver a la chica ser la primera en dormirse, casi pareciendo que jamás hubiese dormido en una cama o en como evitaba incomodar a sus compañeros en la cama quedándose completamente estática, era un buen detalle, suponían.

Ahora, ella se adaptó a la compañía, obtuvo la confianza que necesitaba para mostrarles quien era realmente y no había mejor formar en demostrarlo al momento de dormir

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Ahora, ella se adaptó a la compañía, obtuvo la confianza que necesitaba para mostrarles quien era realmente y no había mejor formar en demostrarlo al momento de dormir. Ella era un desorden, un resorte que golpeaban fuerte y una máquina de agua.

Debido a ello, los dos adolescentes tuvieron que decirle adiós a la comodidad de una siesta nuevamente y ver el sol a penas apoderarse del cielo mientras ella extendía cada extremidad en la cama -únicamente disfrutaban el reposo nocturno cuando en...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Debido a ello, los dos adolescentes tuvieron que decirle adiós a la comodidad de una siesta nuevamente y ver el sol a penas apoderarse del cielo mientras ella extendía cada extremidad en la cama -únicamente disfrutaban el reposo nocturno cuando enviaban a la muchacha a dormir en el sofá o en su propia habitación, así se salvaban de sus empujones y mordidas-. Aceptando el hecho de no podrán volver a concebir el sueño, Kakyoin fue el primero en pedir el baño mientras Jotaro sentado a un lado del colchón quitaba el polvo de su gorra.

Este Mundo Bizarro° (Jotaro x lectora)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora