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¡Bienvenidos/as!
La Editorial Edén abre su sección de Entrevistas,
solicita una para tú libro y haz que tus lectores
conozcan otra parte de ti.
¡Mejoremos nuestros futuros!
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Lamentamos la tardanza, las entrevista seguirán publicándose poco a poco. ¡Seguiremos contactando a las personas que faltan por ser entrevistadas! Recuerden que cualquiera que desee unírsenos es libre y bien recibido en la Editorial Edén.
Disfruten nuestras entrevistas tanto como nosotros nos divertimos entrevistándolos y soliciten nuestros servicios con total libertad.
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El cielo de la ciudad estaba bastante opaco, la neblina casi podría llegar a cubrir las calles por completo, sin embargo, logre llegar a mi objetivo, la casa de Andrea. No quedaba muy lejos, pero el llegar a esta con un clima como el del hoy, hacía que mi camino fuera difícil. Toqué la puerta de su casa con emoción, comencé a retirar mi chaqueta para esperar el momento donde la puerta es abierta por la chica. Me saludo con amabilidad, dejándome pasar dentro de su casa, era pequeña, en realidad parecía una cabaña, tenía la chimenea encendida junto a una mesa con dos tazas de café con el humo sobre esta.
Andrea se sentó a un lado de la mesa, sobre un pequeño cojín rojo, señalo otro en color azul para mí, por lo que sin pensarlo me dispuse a tomar asiento. Sería una entrevista acogedora, con una chimenea calentándonos y una taza de chocolate caliente.
― ¿Cómo te has sentido con la cuarentena? ¿Has aprendido algo en todo esto? ― exclamo en un tono intrigante, comenzaba nuestra conversación para que ella pudiera entrar en confianza.
Deje sobre la mesa una pequeña grabadora donde quedaría grabada toda la entrevista, a ella no le pareció molestarle en realidad, pues respondió mi pregunta.
―La verdad, siento que todos hemos aprendido algo con esto, yo aprendí a convivir más con mi familia, antes estaba un poco distanciada de ellos, así que esto me ha ayudado― responde dándole un sorbo a su taza.
―Es una buena reflexión, tienes razón. Esto ha ayudado a que la familia se una― asiento con algo de rapidez ― ¿Puedes contarme de ti? ¿Cómo te describes a ti misma?
Mueve su cabeza en señal de aprobación, deja su taza en la mesa para responder ― Como una chica un tanto reservada, pero alegre, sensible, soy muy sensible, pero no lo dejo ver demasiado, y libre.
