Siempre estaré contigo | Hades x Perséfone |

Capítulo 16

En aquel cuarto que era algo pequeño, sucedían cosas tan grandes y en eso se podía escuchar las pocas esperanzas que tenia de que Artemisa me perdonara, si había traicionado su confianza y arriesgue su relación con mi madre. Sus palabras aun sonaban en mi cabeza, le había dolido que no confiara en ella, después de todo era como una segunda madre siempre se preocupaba por mí.

-Artemisa yo de verdad lo siento – la mire con pena – no pensé en cómo te podías sentir con esto, simplemente no pensé en ti – era mi amiga y no pensé en como la haría sentir, yo era de lo peor – de verdad no tienes idea de cómo lo siento – pequeñas gotas de agua salieron de mis ojos – te juro que no era mi intención lastimarte

Hubo un silencio mientras lloraba, pude ver el rostro de Artemisa, era combinación de pena, furia y compasión o eso pensaba, solo puso su mano en mi hombro y hablo con un tono algo preocupado.

-No espero que lo entiendas Perséfone, pero existen límites entre algo bueno y algo como Hades – su expresión se volvió dudosa para mí, pero no me gustaba como se refirió a Hades, no era mal como ella decía – no me malentiendas, no quiero juzgarlo por como lo hicieron quedar los mitos, pero – hiso una pausa – solo quiero que tengas cuidado y a partir de ahora me cuentes todo.

-Perséfone ella tiene razón – hablo Eros mientras se me acercaba – debemos tener confianza en ella, después de todo vivimos en su casa – reímos un poco ante su comentario – además es nuestra a amiga y estoy seguro que ella no te va a prohibir nada con respecto al amor.

Tal vez tenía razón, pero si ella hablaba y todo el olimpo se enteraba, sería mi fin y tal vez el de Hades, depende de cómo lo tome la gente. Dentro de mí no cabía la posibilidad de no estar con Hades, almenas como amigos, solo no quiero que me obliguen a separarme de él.

-Está bien, vamos a contarte todo y quiero aclararte lo que paso en la cocina de el – pare de llorar y nos sentamos en el borde de su cama.

En ese tiempo conversamos de todo lo que había pasado en estos 2 meses que vengo conociendo a Hades, en realidad no hay tanto que contar pero ellos se emocionaron mucho con cada cosa que contaba, en especial Eros. Artemisa más parecía preocupada y yo la entendía por completo.

-Perséfone ¿Qué planeas hacer con lo de las diosas de la eterna virginidad? – La pregunta que tanto había tratado de evitar me la hacía a primer plano – sabes que de todas maneras estará bien que salgas con el pero sin "eso" ¿no crees que se aburrirá?

¿Hades se aburrirá de mí sino tenemos sexo? No creo que sea muy justo pensar eso sin habérselo preguntado, pero no es como si llegara y le dije: oye me gustas pero no puedo renunciar a mi virginidad por miedo entonces ¿jalas o no jalas?, obviamente no le diría eso. Aunque admito que me da curiosidad saber que se siente hacer "eso", no Perséfone piensa en la biblia, a lo que voy es que Hades es un hombre muy atractivo físicamente pero si no rechazo eso, nosotros no podremos hacer el amor.

-No me pregunte eso ahora – hable algo incomoda – no es algo de lo que ya haya pensado, ni siquiera sé si a él le gusto de esa forma – me sonroje involuntariamente

-Pese tus palabras no concuerdan con tus pensamientos –Eros hablo y rio al final.

-Creo UE es importante para que tengas una decisión clara lo antes posible, recuerda que es una decisión importante y nadie puede obligarte a nada, es completamente tuya – se paró y se dirigió Asia su cómoda (o repisa es casi lo mismo) donde saco una cajita – esta es una tarjeta de bienvenida a las diosas de la eterna virginidad, a lo que voy es que tu madre a decidió cada parte de tu futuro y tu aun no lo sabias, te han privado de sesiones muy personales, pero yo quiero darte una oportunidad de revertir eso.

No tenía idea que mi madre podía llegar a tanto para mantenerme cerca de ella, es espeluznante incluso para una diosa, lo peor es que todos lo sabían pero nunca me dijeron nada de esto. Pero ahora me daban una oportunidad de tomar esto personalmente. Sé que me amaba pero esta era demasiado incluso para ella y su afán de retenerme, los hijos en cualquier momento se irían y ella no lo entendía, yo haría que se grabe en su cabeza que todos merecen ser libres (y por esas ideas Perséfone termino casada con el rey del inframundo)

-¿Sabes qué? – Cogí la carta – que se joda mi madre y sus planes para mí –rompí la carta que contenía mi bienvenida, es el primer comportamiento que tengo en contra de ella y verdaderamente se sintió bien poder liberarme por así decirlo.

-No tenías que romperla, pero me alegra que cambiaras algo que estaba predestinado para ti – suspiro – aún falta que se lo digas a las demás y sobre todo a tu madre, pero tendrás nuestro apoyo siempre ¿verdad Eros?

-Obviamente, te ayudaremos a atrapar a ese lobo solitario y no morir en el intento – reímos un rato – empezaremos hoy en la fiesta de Zeus

-Lo había olvidado por completo, Apolo esta abajo esperando por Artemisa e ir juntos a la fiesta – Salí hacia abajo para avisar que si iríamos con el pero este ya no estaba. Seguro que se aburrió de esperar y se fue, mejor para nosotros ¿cierto? 

-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-.-

Hola chic@s, quería agradecer por el apoyo y en especial a Cami_ale2005 por comentar y votar en esta historia, de verdad muchas gracias UwU