~Arrow Of Love~BNHA x T/N [EDITANDO]

120: Ayudala

////Sango
–XXXX antes–

"Antes de romper mi promesa"

Sango: Ya está bien –rei–

T/N estaba abrazándome por la espalda, haciéndome algo de cosquillas al poner su labios cerca de mi cuello.

Sango: será mejor que nos vayamos, si llegamos tarde podrían regañarnos, recuerda que la guerra aún no termina, somos el único imperio que se a mantenido intacto.

T/N: Lo se...pero no entiendo a que voy, yo ya no soy caballero.

Sango: Aunque hayas querido salirte y vivir una vida normal, tienes la obligación de obedecer al rey cuando se te requiera, recuerda tu juramento.

T/N: Aaaaaag–resignada–. Esta bien....—de mala gana–

Ella se separó de mi para ponerse lo que le restaba de la armadura, al igual que yo. Segundos más tarde salimos de casa. Este era el único lugar seguro para ambas, estaba lejos, dentro del bosque, nadie sabía de este lugar.

Subimos al nuestros caballos y nos dirigimos a la ciudad. Al llegar había un gran alboroto, la gente gritaba obscenidades mientras abucheaban a algo.

T/N: ¿Que esta sucediendo? ‐preguntó con curiosidad a una pueblerina–

Pueblerina: ¡Son esas pecadoras, que traen solo desgracia y asquerosidades al mundo! ¡Dios debe castigarlas!

Nuestros rostros confundidos se miraron. Solo había una cosa. Nos acercamos al centro de la ciudad, pero fue desagradable ver lo que había ahí...simplemente no lo soporté.

En el centro de la ciudad, habían dos mujeres, llorando y rogando por su vida, mientras estaban amarradas y completamente heridas e ensangrentadas, las habían golpeado y torturado durante un buen tiempo, se notaba.

T/N: ¡¿QUE HACEN?! ¡BAJENLAS DE AHI INMEDIATAMENTE!

El enojo de T/N era más que evidente, yo solo podía sentir miedo, miedo a que en algún momento, esas seamos nosotras.

Sacerdote: ¡¿Te atreves a defender a estas hijas del demonio?!

T/N: ¿no se le ocurrió otro insulto? —incredula—. Ellas son personas. Son exactamente iguales a nosotros y lo que hagan entre sí es muy su problema, ¡No tienen por qué meterse en al vida privada de los demás!

Princesa: ¿Te atreves a ir contra la iglesia de nuevo? ¿Acaso necesitas que te enseñen a respetar la naturaleza de dios? ¡Ellas estan enfermas!

T/N: Tu no te metas, no eres muy santa que digamos princesa Lissa, ¿o ya se te olvidó que debías llegar virgen al matrimonio, y ya llevas en la cama de más de la mitad de mis caballeros?

El rostro lleno de cólera de la princesa de nuestro reino era una medalla, simplemente satisfactoria, de igual forma, la expresión de disgusto y los mumuros por parte de la gente no se hicieron esperar.

T/N: ¡HAGAN LO QUE SE LES PLAZCA, PERO MIENTRAS YO ESTE AQUI, NO VOY A PERMITIR ESTE TIPO DE BAJEZAS!

Ella se acercó a las chicas y con su espada corto las cuerdas que las retenían, haciéndolas caer, primero a la que estaba casi moribunda...cargandola y dandomela para cuidarla, con un pequeño gesto de: "no tengas miedo".