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Y no estaba solo. Y Cornelio recordó por qué. Recordó quién era esa mujer a sus espaldas. Recordó que era la secuestrada de Valentín, y mucho.. que se había enamorado de ella. Tal vez sentía lo mismo que Cornelio. Ese sentimiento tan fuerte, tan puro, tan sin igual, que los había llevado a amarlas muchísimno.
- Pensé que estabas.
- Volví. - Valentín se adentró. - ella es Ashley - la pelinegra era realmente hermosa. Tenía unos ojos completamente indescriptibles. Marrones como el café puro y oscuro, y una bonita sonrisa. Ella estiró la mano. Lucía tímida. Tímida cómo Lú al momento de conocer a los amigos de Cornelio. Cornelio apretó su mano.
-Mucho gusto... - le dijo él. La verdad no había nada en ella que le llamara mucho la atención. Y es que Valentín y él siempre habían tenido gustos diferentes. - vale y...vas a explicarme que ha sido de ti?
- No tengo tiempo..- le dijo Valentín.
Entonces Cornelio observó que ninguno de los dos, ni Ashley ni Valentín, traían maletas en alguna parte. Su amigo cogió la mano derecha de Ashley y la entrelazó con la suya. - necesito hablar contigo.
- Hablemo...
- No..Cornelio, aquí no..
-Por qué? ¿Qué mejor lugar que mi propia casa?
- Es complicado jo.der, entién..- Valentín bajó la voz. Los tres se voltearon a mirar quién estaba tras ellos. Lú entreabrió los labios. Al mismo tiempo que los ojos se le llenaban de lágrimas. Sonrió. Y pronto se pondría a llorar. Ashley se apretó los labios, la miró con ternura, quería decirle muchas cosas, aquellas que jamás pensó que viviría con su propio secuestrador. Y ambas corrieron a abrazarse sin que alguien se los dijera. Unas lágrimas más y varias sollozos.
- Estás aquí... - Lú la miró enternecida. Cornelio no le había comentado nada sobre ella y Valentín. Sobre la relación que tenían.
- Pensé que lo sabías. - susurró Ashley, solo para los oídos de Lú. - Valentín y yo...- se volteó a mirarlo. Él solo hizo un gesto amable con la boca, parecido a una sonrisa. Debía admitir que era preciosa. Jo.der, Lú en verdad lo era.
- El es Valentín, mi hermano... - le presentó Cornelio. Ambos se saludaron. Por qué no le había dicho antes que una de sus mejores amigas, por no decir que era la única que quedaba viva, salía con su hermano? No sabía cómo interpretarlo.
- Podemos salir a hablar un momento? - le preguntó Valentín.
- Si. - contestó Cornelio al notar que Lú y Ashley ya se encontraban entretenidas entre las dos, por lo que ninguna se percató de la falta de ambos.