Capítulo 56: Desacuerdo

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La voz de Li Xiao fue presionada muy bajo, llevando una amenaza deliberada. Sin embargo, Song Song que escuchó sus palabras no se sintió asustado en absoluto. Volvió la cara e ignoró al hombre, la mano que se colocó en su abdomen comenzó a moverse hacia arriba, alcanzando lentamente sus costillas.

Su movimiento era muy lento, sin embargo, Song Song rápidamente se dio cuenta de lo que iba a hacer. Aunque esa mano no llegó a su destino, las cosquillas de su cuerpo ya empezaron a reaccionar.

Song Song se rio a carcajadas y se giró a su lado, acurrucándose para abrazar esa mano —¿Qué estás haciendo, ah?

Su espalda estaba de cara a Li Xiao, desde esta vista trasera, parecía un pequeño e inofensivo animal. Li Xiao se acercó y convenientemente lanzó un brazo alrededor de Song Song, tirando directamente del otro en su abrazo.

Sopló ligeramente contra la oreja de Song Song y dijo con una voz profunda y magnética —Song-er es tan travieso.

Song Song sintió que su oído se entumeció y no pudo resistirse a agachar la cabeza. Sin embargo, fue rápidamente sostenido por Li Xiao —Cuidado con tu lesión.

Sintió el aguijón, y obedientemente dejó de moverse. Pensando en ello ahora, todavía sentía un miedo persistente. La muerte lo perdió por un pelo, si esa espada estuviera una pulgada más cerca, entonces su cuello no sólo sangraría un poco, hubiese chorreado sangre.

Li Xiao miró las vendas que tenía alrededor de su cuello, los dos no hablaron más hasta que Song Song preguntó —¿Tiene su alteza algún plan?

—La primera línea ha triunfado, la nación de Jin continúa perdiendo terreno. Se espera que envíen gente en secreto a la capital para buscar una oportunidad de explotar. Esto realmente me dio una nueva idea, podemos copiar sus planes. Si su línea de frente colapsa, entonces su espalda también se volvería caótica. Entonces las cosas se pondrán interesantes.

—Deberíamos planear esto meticulosamente.

En este momento en el palacio de Yangxin, el emperador Hong Ren estaba leyendo. Desde que la emperatriz Zhao falleció, su pelo negro se había blanqueado mucho. Por buscar una cura para Li Xiao todos estos años, además de dirigir una nación, su cuerpo se había ido debilitando con cada año que pasaba.

Sin embargo, al final seguía siendo el emperador. Incluso si simplemente se sentó, es suficiente para infundir miedo en los corazones de la gente.

Por alguna razón insondable, la emperatriz Qin fue convocada aquí durante unos quinces minutos. Sin embargo, el emperador no había dicho una sola palabra desde el principio. Como él no habló, ella sólo pudo sentarse allí, cada vez que el emperador pasaba una página de su libro, su corazón se tensaba nerviosamente.

Hasta que el otro pareció cansarse de leer, Dou gonggong se adelantó para aceptar el libro y lo guardó, el emperador finalmente la miró y dijo —La emperatriz vino, ¿Eh?

Es casi como si en este momento se diera cuenta de este hecho —Alguien, sirva el té.

La emperatriz se puso de pie para aceptar la taza de té, muy desconcertada. Los eventos que ocurrieron ayer, también la dejaron perpleja, como si hubiera una conspiración en su contra.

—¿Ha ido el príncipe heredero a verte últimamente?

—El príncipe heredero es muy filial, nos visita a menudo.

El emperador Hong Ren asintió con la cabeza y dijo —Es un buen niño. Zhen planea que llevar a Xiao-er para que se encargue de los campos de refugiados. ¿Qué piensas?

Tirano Mimando "Esposa" a Diario.Where stories live. Discover now