Capítulo IV

1.5K 171 57
                                    

Dos días habían pasado desde su discusión con Niel y la visita de Terry en el hospital. Candy se sentía cansada, tanto física como emocionalmente. El saber que el día siguiente saldría con Terry la tenía con los nervios a flor de piel.

Esa noche, la joven doctora salió a caminar al jardín. Necesitaba estar un tiempo al aire libre y meditar en todo lo que había sucedido en los últimos días.

Se encontraba sumergida en sus pensamientos cuando escuchó el motor de un auto. Aquello llamó su atención ya que Albert, y sus primos estaban en casa. Su corazón se desbocó al pensar que se trataba de Terry, pero su desilusión fue grande al ver a Niel aproximándose a ella.

—Hola Candy.

—¿Que haces aquí? —preguntó ella ignorando su saludo.

—Quiero disculparme contigo.

—Podías esperar hasta mañana para hacerlo, no necesitabas venir hasta aquí a estas horas —dijo mirando su reloj.

—Lo sé, pero no pude aguantar el impulso de venir a verte, ya han pasado dos días desde la última vez que nos vimos, y como nos has respondido ninguna de mis llamadas creí que podías necesitarme y tal parece que no me equivoqué.

—No sabia que además de empresario eras una especie de clarividente.

—No necesito serlo para saber que me necesitas.

—Yo no te necesito —replicó ella con dureza —así que puedes marcharte por donde viniste —le señaló el camino.

—¿Es por él verdad? . Lo vi salir del hospital la misma tarde que te enfadaste conmigo.

—¿Desde cuando te dedicas a espiarme? —preguntó Candy frunciendo el ceño

—No lo hago, fue solo una casualidad, fui a buscarte para hablar contigo.

—Pues para que te enteres, saldré a cenar con Terry mañana.

—Vaya, me sorprende el progreso que han tenido en estos dos días —comentó Niel con la mirada fija en ella.

—No hay ningún progreso entre nosotros —respondió Candy con brusquedad —Es una cena para conversar civilizadamente como las personas adultas que somos

—Ya veo —respondió Niel incrédulo.

—Escúchame bien Niel, mi matrimonio con Terrence es parte del pasado, y te aseguro que no tengo ninguna intención de volver a vivir eso.

—Me alegra escuchártelo decir —respondió él con una sonrisa.

El silencio los rodeó hasta que Niel rompió este

—Cásate conmigo Candy, te prometo que no voy a defraudarte

—No puedo responderte ahora —murmuró ella incómoda —necesito un poco más de tiempo.

—¿Cuánto tiempo mas necesitas para aceptar mi propuesta? —preguntó él mirándola.

Candy alzó el rostro y lo miró fijamente a los ojos, en ese momento recordó la voz de Terry hablándole al oido.

<<Maldito Terry, porque tenias que aparecer en mi vida una vez mas después de tanto tiempo para perturbar mi tranquilidad >>

Buenas noches Niel —dijo Candy como única respuesta —ya es tarde y mañana me espera un día largo.

—Candy  —Niel posó su mano sobre su hombro impidiendo que se marchara —No me hagas esperar más,  por favor —suplicó

Una Eternidad ContigoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora