Los Chicos Del Club de Voley || HQ YAOI

35 - ❇

—Ya estamos aquí, era el trato así que ahora dime quién te gusta. —Kageyama se sentó en la fuente de aquel lugar céntrico.

—Tu dijiste... Que también tenías que decirme algo, así que tú deberías hablar primero ya qué me citaste.— le contestó cabizbajo sentándose a su lado con los nervios a flor de piel.

Hubo un pequeño silencio entre ambos, el bullicio del lugar era todo lo que se escuchaba. Tobio miraba con atención al más bajito, observaba el vapor frío que salía de el cuando exhalaba, pensó que había sido mala idea sacarlo de casa para hacerle pasar frío, sobretodo porque Hinata enrojecia de la nariz y las orejas por el frío. En cuanto al contrario sentía su mirada punzante y eso solo hacia su corazón ir más rápido de lo normal.

—Creo que es importante que tu me lo digas primero, pero si no quieres entonces lo haré yo.— de un momento a otro el pelinegro dejó de verle y frunció el ceño mientras miraba al suelo. —Tu y yo... Al menos por este año, hemos estado juntos la mayor parte del tiempo...

—Si, bueno... ¿Pero qué hay con eso? — Hinata comenzaba a alterarse.

—¡Escúchame!— por un segundo le miró a los ojos y le gritó. —A lo que quiero llegar...— hablaba cada vez más perdido en las palabras, rascando su nuca, pasando de hablar fuerte a murmurar. —No fue tan malo salir contigo...

—¿Eh?— el pelinaranja giro su rostro para chocar miradas, sus mejillas habían enrojecido y no por el frío.

—Digo, ser tu pareja por un rato no ha sido tan malo... De todos modos pasábamos todo el rato juntos desde antes, y la escuela dejó de hablar mal de mi cuando empezamos a salir. No es como si eso me importara, pero es más conveniente ¿No crees? En lugar de terminar el juego hoy podríamos salir juntos ya que de todos modos prometimos no tener pareja mientras seamos amigos...— Kageyama habló rápido, como si estuviera nervioso hablando de ello, y no podía expresar otro modo más que lucir terrorífico. —Es decir, es conveniente.

Hinata al acabar de oirle sintió su pecho presionar, sentía tanta decepción y sobretodo enojo por lo que oía. Podía ser tonto y descuidado pero no iba a permitir prestarse a cosas que dañarian sus sentimientos.

—¿Me estas pidiendo que salga contigo por conveniencia?...— habló con el ceño fruncido.

—Bueno...— sorprendentemente el nerviosismo acabo por consumir a Tobio y tomó al más bajo por los antebrazos. —Mientras estemos juntos será lo mismo, ya que de todos modos no podemos tener pareja.— realmente se excusaba.

—Kageyama— musitó apartando sus manos y mirándole enfadado. —¿Yo acaso te gusto?

Quizá fue por la presión del momento, la conversación solo iba cada vez más en picada, para nada lo planeado, pero Kageyama pecaba por cabeza hueca. Al instante negó como si ni siquiera hubiera asimilado la pregunta, acabando así con la paciencia y las ilusiones de un Hinata que hasta el momento había pretendido ser fuerte.

—...Entonces no le pidas a alguien que no te gusta salir contigo.— parecía estarle regañando.

—No me molestaría besarte.— dijo Kageyama deshaciendo sus expresiones para hablar como si no tuviera sentimientos, prácticamente se le había secado el cerebro y había entrado en corto circuito por sus propias palabras.

Hinata paso del enfado y decepción a asombro y algo de miedo, su armador parecía estar loco.

—Entonces debiste hacerlo el día del reto y nos hubiéramos ahorrado una semana entera.— se levantó de aquella fuente comenzando a caminar lejos del peligro, pero este no tardó en seguirle.

—Solo sal conmigo y deja de actuar como una chica.— no podía evitar buscarle pelea, era su instinto.

—¿¡YO ESTOY ACTUANDO COMO UNA CHICA?!— y el pelinaranja no podía evitar responder. —TU ERES EL UNICO AQUI QUE ACTUA COMO EL GALAN DE ALGUNA PELICULA BARATA.

—¿Película barata? Te estoy hablando en serio, podría besarte en cualquier momento porque tengo muchos más huevos de los que tú tienes.— habían caminado hasta salir de la zona céntrica, Kageyama detuvo a Hinata nuevamente tomándolo del antebrazo para que girará a verle a los ojos mientras hablaba. —Si no te besé ese día del estupido reto fue porque parecía muy importante para ti ¿Cómo iba a hacerle eso a un NIÑO?

—Soy mayor que tú.— le enfrentó directamente más enojado que nunca, pero sonriéndole solo para irritarlo. —Asi que deja de portarte como si pudieras más que yo, H de héroe.

Fue lo último que dijo, en un tono de burla, dándole un manotazo para que le soltara.

Kageyama quedó perplejo cuestionandose a si mismo todo lo que había pasado. Vio alejarse al más bajo entre la nieve y la noche, y eso solo le hizo dar cuenta como su corazón saltaba, tal y como si hubiera vivido el partido más importante de su vida.

Cuando se dio cuenta que uso muchas palabras equivocadas y que en efecto era un tonto ya era demasiado tarde, estaba regresando a su casa solo y probablemente con un problema de los que tenia antes de salir.