𝑲-𝑰𝒎𝒂𝒈𝒊𝒏𝒂𝒔 • 𝑨𝒄𝒕𝒐𝒓 & 𝑰𝒅𝒐𝒍𝒔.. [ Pedidos Cerrados ✍ ]

62 [ Lee Dong Wook +18 ]

Pedido por rosettic ❤️. Bebé no hablamos y se que ya dijiste tener todo planeado pero porfa, no lo hagas 💔.

Bajo la lluviosa tarde de aquel lunes 8 de noviembre Dong Wook observaba con preocupación a su hermosa novia, que poco a poco se fue apagando debido al arduo trabajo en el cuál hoy en dia se la vivia inmersa.

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No pasó mucho tiempo para que el más alto se diera cuenta de la situación, las ojeras notables bajo los hermosos ojos de la menor, que poco a poco fueron perdiendo su brillo debido al cansancio extremo. La notable pérdida de peso que se comenzó a notar en estos días, estrujaba su corazón cada vez más.

Ésta noche estaba dispuesto a cambiar eso, se acercó a paso decidido a la oficina en la cuál trabajaba su novia en estos meses de cuarentena, en donde se la encontró cabizbaja mirando sus zapatos, soltando suspiros de cansancio de vez en cuando.

— Princesa... — Volteó la silla y se agachó en frente de la menor, quién lo miró arqueando una ceja al notar como éste se hacia pequeño tratando de verla a los ojos. — Vamos... — La tomó de los brazos y la levantó, guiandola de vuelta a la habitación que ambos compartían, Mónica caminaba arrastrando los pies demostrando su cansancio.

La sentó en la cama y le quito las pantuflas, seguido de la molesta chaqueta y pantalón, dejándola tan solo en camisón y bragas, a lo que la menor volvió a arquear las cejas un poco pícara.

— ¿Que es lo que planeas hacerme eh Lee Dong Wook? — Juguetona, tiró al mayor a la cama y se subió encima de él, recostando su cabeza en el pecho del chico sintiendo su corazón latir con velocidad.

— Solo... Quiero que estés bien... — Susurró. La menor levantó la mirada viéndolo confundida. — Me he dado cuenta de esto últimamente, no intentes ocultarlo, se que el trabajo te tiene cansada y el hecho que de no me dejes ayudarte o hacer algo me vuelve loco. Sabes que no tolero verte sufrir, me parte el corazón ver cómo te estás desmoronando — Confesó sentándose nuevamente al lado de la menor. A la cuál con el pasar de los segundos y recordando sus palabras, sintiendo como sus orbes se llenaban de lágrimas. ¿Como podía alguien conocerla tan bien?

— Oppa, yo... — intentó hablar pero se vió interrumpida ante el ademán del mayor.

— No intentes derretirme con esa mirada o hacer alguna justificación en tu defensa, sabes que no estás sola en esto y mientras que yo esté a tu lado te puedes apoyar en mi ¿Sí? — Ahueco su rostro limpiando sus lágrimas, logrando que Mónica sacara a relucir una de las tantas sonrisas que lograban volverlo loco.

— Está bien. — Sonrió.

— Mañana y los demás días, promete que me dejaras ayudarte aunque sea un desastre en esa área, trataré de hacerlo y no hacerte tener tanto trabajo y que puedas descansar, no acepto un no como respuesta — Añadió notando como la menor abría la boca intentando hablar, lo cuál ocasionó una risa por parte de ambos. Ambos sabían que el era un desastre trabajando con papeles.

— Entonces... ¿Que intentabas hacerle señor gruñón? — Con una mirada pícara, se acercó a él mayor hasta sentarse a ahorcadas sobre él, sintiendo como la flácida masculinidad de su novio se iba endureciendo ante su tacto.

— ¿De qué habla señorita? No logro captar su duda — Se acostó dejándola abajo de el sin afirmarse, comenzando a repartir suaves besos a lo largo de su cuello, hasta llegar a su abdomen. En el cuál repartió besos sintiendo como la menor se retorcía ante el tacto de sus tibios besos.

— Dong... Wook — Gimió, a continuación pudo contemplar como su novio quitaba con amor sus bragas y el camisón, dejándola desnuda ante él.

Pudo notar como mantenía su mirada embobada en su cuerpo a medida que se deshacía de cada una de las prendas que le impedían el paso al paraíso.

Cuando estuvo sin nada encima, se acercó a la chica y la miró a los ojos, para después posar sus labios sobre los de ella y comenzar un beso suave que poco a poco se fue haciendo más salvaje y apasionado.

Luego de unos segundos introdujo su masculinidad en el interior de la chica, soltando un gemido entre el beso al sentir lo apretada que ella estaba. Aún besándola comenzó el vaivén de embestidas dejando que ambos se sumergieran en un enorme placer y en su nube de amor.

La tocaba y pensaba que era lo mejor que pudo haber llegado a su vida, cada día se levantaba con esa hermosa carita frente a él y su día se llenaba de luz y de paz.

Era su amor, su bebé, su vida, su todo. Y la protegería de todo lo que se les viniera encima sin importar qué.

La amaba con todo su corazón. 

Lo escribí y sentí que no podía no subirlo. ❤️ rosettic.

Espero te guste ❤️.

Parte 1.

La otra parte tendrá más Smut, pero no quería hacer esto tan largo.