Jennie una estudiante normal como cualquier otra, pero todos los viernes sin falta seguramente estaría matando algún delincuente en su sótano.
Lisa una chica que ha sufrido gran parte de su vida, parte de uno de los clanes más grandes, por casualida...
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Manos jóvenes llenas de sangre, cortinas cerradas y un espejo roto.
Una chica castaña de nombre Jennie se encontraba frente al cadáver de su padre, con los ojos llenos de lágrimas y una sensación de alivio enorme en el pecho.
"Irá contenida"
¿Algún día tenía que salir a la luz verdad?
Jennie no estaba necesariamente arrepentida por lo que acababa de hacer, aquellas lágrimas nisiquiera eran de dolor ¿Eso la volvía una mala persona? No, claro que no... Su padre era la mala persona, él se lo merecía y si ella no hacía algo probablemente nadie lo habría hecho.
Después de todo el mundo se deja guiar por las etiquetas, a las personas no les interesa nada más que la imagen de uno... ¿Por eso su madre había muerto encerrada en una clínica mental verdad? Porque nadie quiso creerle cuando dijo que su esposo la maltrataba "Imposible, el jefe Kim no haría algo así"
Solo bastó que su padre dijera que su esposa lo había engañando, que se había vuelto loca y que solo estaba inventando todo para hacerle quedar mal.
Solo bastó eso para que le creyeran, nisiquiera habían comenzado una investigación o se habían tomado la molestia de pedir pruebas ni nada cuando las marcas de maltrato en su madre eran muy evidentes.
Jennie no era como su madre, ella no pensaba aguantar maltratos de su padre y mucho menos pensaba esperar que un ángel bajara del cielo a salvarla, para ella el mundo era una mierda, las personas que lo habitaban eran una mierda, en fin, todo era una mierda y si ella no hacía algo al respecto nadie lo haría.
[6 AÑOS DESPUÉS]
Ahí estaba, la misma chica de hace unos años, caminando tranquilamente por los pasillos de su universidad, cargando una mochila y escuchando música como cualquier otro adolescente...
- ¡Jen! - Una chica morena aproximadamente de su misma estatura se le lanzó repentinamente por la espalda envolviendola en un abrazó haciendola sentir realmente incómoda, sin embargo no era algo que podía demostrar de forma pública ya que se suponía que Jisoo era su "mejor amiga" por consecuente se suponía que no se sentía incómoda con ese tipo de contacto.
- Jisoo - Jennie sonrió de lado luchando con su deseo de alejarla a punta de amenazas - Que sorpresa...
La morena le correspondió la sonrisa y deshizo el abrazo para caminar más cómodamente por el pasillo - Mañana habrá una fiesta en casa de Irene ¿Si irás?
Jennie suspiró - Los viernes no puedo, te lo repetí como un millón de veces - Respondió sonando lo más tranquila posible cuando en realidad tenía ganas de gritárselo, realmente le desesperaba la gente, pero si quería seguir viviendo una vida "normal" necesitaba de Jisoo, era la más soportable entre lo insoportable.
