𝑪𝒐𝒎𝒆 𝒕𝒐 𝒎𝒆 [𝑴𝒊𝒏𝒔𝒖𝒏𝒈]

9» enamorarse no suena mal por la noche

—¿Y esa sonrisa?— preguntó curioso acercándose a él. Tomó asiento a un lado suyo sin siquiera preguntarle si podía hacerlo.

—¿Ah? no es nada— infló sus mejillas.

—Mentir es malo— arqueó una ceja— ¿qué es?

—Mjm— rodó los ojos—, sé que es malo, pero también es malo contar las cosas antes de tiempo.

—¿Crees que puedo darte mala suerte?— preguntó haciendo una mueca— ouch, duele Minho.

—No es eso— negó con la cabeza entre risas—, sólo no quiero precipitarme.

—¿Qué es?— chilló. Ladeó su cabeza para recostarla sobre el brazo del mayor—. Dime, dime, dime.

—Nada.

—Si no me dices, haré que nos saquen de la biblioteca— bromeó. Quizás.

—Pfff, que amenazador y necio eres— se alejó de Jisung para acomodar su sudadera—. Tengo una entrevista de trabajo la próxima semana, es todo.

—¿Ah? ¿Ahora tendrás otro trabajo? oye... ¿eso por qué te hace feliz? no tendrás ni tiempo de respir...

—Si consigo el puesto, renunciaré en el club. Eso es obviamente Jisung— rió al ver la cara de confusión del mencionado—, eso es lo que me tiene animado. No esperaba que me consideraran para la entrevista.

—Oh... entonces también estoy feliz. Estaré enviándote muchas buenas vibras— le guiñó el ojo.

—¿Venías a la bib...

—Venía a verte— volvió a guiñar el ojo—, ya sé tu escondite.

—Felicidades, ¿quieres que te aplauda?— preguntó con sarcasmo en su voz.

—Si quieres, no estaría mal... pero mmm, biblioteca. Nos sacarán y será tu culpa, no mía— sonrió burlón.

—Entonces olvídate de los aplausos— rió volviendo su vista al libro que tenía en manos.

—¿Harás algo el fin de semana?

—¿Por?— preguntó sin despegar su vista del libro.

—Quiero salir, no tengo con quién y...

—¿Me has tomado como opción de repuesto?— arqueó una ceja—, puedes salir solo, ni que fuera una obligación salir con compañía.

—Para mí lo es... y no, fuiste la primera persona que vino a mi mente— acarició el cabello de Minho—, tu cabello se está volviendo raro... ¿volverás a teñirlo?

—Mmm— miró curioso a Jisung—, no creo, no tengo ningún color en mente... y aunque haya sido el primero en tu mente, me temí que no podré. Tengo tarea que hacer y ya sabes que solo tengo descansos los fines de semana.

—¿Y si sugiero uno?— preguntó animado dando pequeños saltitos sobre el asiento como un niño pequeño—, mmm entonces será una salida al supermercado ¡divertido!

—Adelante— asintió por un momento antes de soltar una pequeña risa— me encanta como te invitas a mis planes.

—Azul... o ¿has probado el negro? ¡mejor un rubio!— aplaudió sin hacer mucho ruido, a los alrededores había gente estudiando y con estrés— ¿Ah? ¿Te encanto?— arqueó una ceja.

—Mmm, ¿no crees que el azul es muy llamativo? y los otros ya los probé— encogió los hombros. Dejó el libro sobre la mesa para dirigirle la mirada, notó una sonrisa burlona en el rostro de Jisung por lo que le imitó—, no tú, hablaba de la situación.