•Epílogo•

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M Í A

Todo lo ocurrido fue de locos pero, ¿qué en la vida no lo es?

Mi historia sin duda alguna es inusual, pero es perfecta.

Me equivoqué, sufrí y pagué por ello. Y ahora cienporciento segura puedo decir, soy feliz.

Tan feliz que no puedo creer que todo este bien. Tan feliz que cada que abro mis ojos para ver al perfecto esposo que tengo no puedo creerlo, tan feliz que cuando veo una sonrisa en la cara de Pablo no puedo creerlo, tan feliz que cuando veo a la pequeña Luz sonreír con esa carita de angelito es difícil de creer, pero no imposible, quería a mi familia, ellos eran importantes para mi, los tenía juntos, y ya no había nada ni nadie que me separara de ellos.

Aunque claro, seguro te quedarás con algunas dudas así que las aclararemos.

Luego de todo lo ocurrido, Chris y yo tramitamos la adopción legal de Luz y con ayuda de Rubén lo logramos en unos pocos meses.

Luego de una pequeña charla decidimos vender nuestros departamentos para así comprar una casa donde quepamos los cuatro, claro, Pablo también vivía con nosotros. Y todo no terminó ahí, claro que no, ahora estábamos temporalmente de vacaciones, tanto el como yo decidimos dejar de trabajar para dedicarnos al cienporciento de Luz y no perdernos nada de ella.

Karen y Marcos después de largos años retomaron algo que ellos llaman amistad, era claro que la única que amaba en esa relación era Karen, Marcos siempre amó a mamá aunque le pese.

Rubén y Christopher realmente mejoraron su relación de padre e hijo, literalmente ver sonreír a Rubén era extraño, ¡lo hacía más seguido!, por otro lado Yenny siguió siendo la mejor de todas, la mejor madre, mejor esposa, mejor suegra, mejor abuela, definitivamente la mejor en todo.

Karen y yo retomamos nuestra relación, claro que Matheo ayudó mucho ahí, y pues su esposo me cae bien.

Nuestros amigos siguieron siendo nuestros amigos. Rich volvió a España con Rachel y seguimos en contacto, lo más curioso es que nuestra relación mejoró un cienporciento. Aye y Mar se fueron de intercambio a Argentina, mientras que Camila y Zabdiel iniciaron un emprendimiento nuevo y exclusivamente familiar, lo que quiere decir que Camila ya no trabajaba con Chris. Y por último pero no menos importante los Joerick, estaban muy bien, nos veíamos frecuentemente, claro que eso se debe a que Erick planeaba ser más que novios con Joel y yo era parte de esa gran sorpresa.

Jackson se declaró culpable y actualmente está cumpliendo una condena de quince años en prisión, se le sumaron cinco años a su anterior condena, y aunque gracias a él mi hermana ya no está, no le deseaba mal alguno, el quería ser libre y vio por el camino fácil así equivocandose de la peor manera.

En estos años había aprendido muchas cosas, muchas. Pero sobretodo aprendí a amar, a amar intensamente, así cómo amaba a Chris, asi como amaba a papá y karen, así cómo amaba a Yenny, así como amaba a Luz, así como amaba mi familia.

Y... si. El camino fue largo. Hubo tropiezos, hubo llanto, hubo dolor y sufrimiento. Pero también hubo alegría, felicidad, buenos momentos, también hubo amor.

Y estaba tan agradecida con la vida, con dios, estaba feliz.

Finalmente la vida me sonreía, finalmente podía sonreír sin miedo a que acabase, finalmente me sentía libre y tranquila. Estaba bien. Muy bien.

De pronto siento unas manos rodear mi cintura y una hermosa mandíbula afeitada reposar en el hueco de mi cuello, cuanto amaba que hiciera eso.

-¿En que piensas amor? -dice el amor de mi vida.

-En ti. En mi. En nosotros.

-¿Con que pensabas en mi eh? -dijo juguetón dejando pequeños besos en mi cuello.

-¡Cochinos! Hay niños aquí presente. -grita Pablo desde el porche señalandose así mismo y a Luz. Olvidé decirles que estaba en el jardín delantero de nuestra nueva y hermosa casa.

Christopher y yo estallamos a carcajadas, luego nos besamos con lengua y todo, mientras que Pablo grita para que nos detengamos, ya que según el es muy joven para ver esto, por nuestra parte seguimos con nuestra sesión de besos.

De algo estaba segura, El amor era como la vida, no siempre era fácil pero, si no paramos de vivir, ¿porqué deberíamos parar de amar?

Esta era mi nueva vida. Y la amaba. Sin duda alguna la amaba.

Porqué sin importar las circunstancias era feliz.

F I N.

𝐂𝐚𝐬𝐚𝐝𝐨𝐬 𝐀𝐥𝐚 𝐅𝐮𝐞𝐫𝐳𝐚 𝐈𝐈.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora