32. Más incomodidad que mi existencia

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-¿Se supone que debería habérmelo dicho? Llevo encerrada en mi cuarto desde, bueno, ya sabes que - dije mirando mis pies mientras los movía nerviosa

-Tu lo has dicho, se supone, pero bueno, no pasa nada. Vamos te ayudare a prepararla, no podemos perder tiempo - el me dio una sonrisa cálida y lo único que pude hacer fue asentir

El se acercó a mi armario y yo me fui hacia mi cama, de debajo de esta saque mi maleta y la posicioné abierta encima de esta. Changbin cogió algunas camisetas de manga corta y otras de manga larga, él las doblaba y me las pasaba para que las metiera en mi maleta, después fueron los pantalones y calcetines; el me pidió que me encargara de la ropa interior mientras él recogía mis cosas de maquillaje y las metía en el neceser. Una vez acabamos cerramos mi maleta, él la cogió y la llevó al salón, yo le seguía incrédula asta la puerta de mi habitación; si tan solo ellos supieran sobre el significado de los colores de mis ojos, ahora mismo se sorprenderían por la cantidad de colores que mis ojos emitían en este momento.

Changbin volvió y se apoyó en el marco de la puerta mientras me miraba con una sonrisa, y aguantándose la risa, contemplando mi expresión, la cual parecía todo un cuadro.

-Bien, ya está todo en el coche, ¿Nos vamos? - dijo llamando mi atención

-¿Eh? Si, si, vamos - dije acercándome a la puerta donde él se encontraba

Al estar delante de él se paró recto y me miró, no parecía querer apartarse de en medio, le mire levemente algo tímida. Nuestras miradas siguieron durante, lo que a mi parecer fueron horas pero en verdad habían sido, unos minutos, él dio un paso hacia delante, acercándose más a mi y acortando la distancia que nos separaba pero, al darse cuenta de la escena, se apartó rápidamente mientras salía por la puerta. Me quedé un poco en shock por lo que acababa de pasar, estábamos a centímetros de distancia y podía sentir su respiración, me empecé a sonrojar mientras miraba el suelo y corría hacia el coche para que nadie, ni siquiera Changbin, me viera. Al entrar, cerré la puerta y me puse el cinturón, miraba por la ventana intentando distraerme, escuché como él entraba en el lado del copiloto y me miraba por unos segundos para después ponerse el cinturón y empezar a conducir.

El viaje transcurrió en un gran e incómodo silencio, ninguno de los dos nos atrevíamos a decir palabra de lo que había pasado momento atrás en la puerta, lo único que podíamos escuchar era el, casi inaudible, sonido de las canciones de la radio. En mitad del camino paramos en una gasolinera, Changbin salió a rellenar el depósito y yo fui al baño a hacer mis necesidades, el volver pude ver como él estaba sorprendido y la radio del coche estaba bastante alta.

-Changbin, ¿estas bien? - dije tocando su hombro

-H-hemos ganado - murmuró leve, pero lo suficientemente fuerte como para oírlo, mientras se giraba a mirarme - Dios, t/n, hemos ganado el premio de the song of the year con Back Door

-AAAAH - Grité feliz para después saltar a abrazarlo - enhorabuena - al darme cuenta de lo que hice me separe y mire al suelo - perdón

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Hola a todxs, como estáis? Espero que estéis súper bien, hoy os traigo un nuevo capítulo de esta historia. Espero que os este gustando mucho si es así dejado una estrella en señal de apoyo y comentad que os parece la historia y que queréis que pase

No te enamoresWhere stories live. Discover now