Ornstein en DXD

Capítulo 5:1 -Malestar

—Señorita Aika...

Clase de matemáticas... Última hora de clase...

Su mirada está perdida en la pizarra, y ojalá fuese analizando los números que hay allí escritos. Su mente está en un plano que vacila entre un sueño y la realidad; su mano derecha sujeta el lápiz con que debería estar tomando nota, en tanto que la otra está jugando con una de sus trenzas.

—Señorita Aika...

Su mirada ahora vuelve a bajar y aprecia lo que se pasó haciendo toda la clase. Un pequeño dibujo en la parte de atrás de su cuaderno...

En este se puede ver lo que parece un hombre de largo cabello, entregándole un ramo de flores a ella. De la boca de la ilustración masculina sale una nube de diálogo en la que dice: Cásate conmigo, Aika.

—¡Señorita Aika!

La castaña sale de su trance en el momento en que un trozo de tiza golpea su frente, haciendo que tenga la necesidad de sobar el sitio afectado.

Con los sentidos recobrados se da cuenta de la situación en que se encuentra y antes de tener que dar explicaciones, busca una pronta salida.

—Una disculpa maestro. No me siento bien.

Y antes de esperar algún reclamo, tomó sus pertenencias y salió del aula. Cerrando tras de sí la puerta con suavidad

Su rostro está bastante rojo y las lágrimas parece que quieren salir; sus pasos se apresuran y la dirigen hacia la enfermería.

Lugar en el que se recostó, para observar el techo y continuar perdida en sus fantasías.

Los minutos transcurrieron lentos, arrastrados por la ansiedad que querer escapar de todo. El último timbre de clase sonó y la castaña recogió sus cosas nuevamente, esta vez con el propósito de ir al Club de Investigación de lo Oculto.

Su mente está tan confusa que ni siquiera se fijó en el frente, presto que chocó contra alguien. Aun así continuó su camino hasta el club. Donde al llegar, inmediatamente tomó asiento en el mueble... Es la primera vez que llega antes que los otros.

—"¿Por qué? ¿Por qué no puedo sacarme de la cabeza su imagen?... Quizá él no recuerde siquiera que existo".

—Ara, ara. Parece que alguien llegó antes que yo.

La mirada de Aika de inmediato se dirigió hacia la recién llegada. Se trata de la Vicepresidenta del Club.

—¿Qué hacías aquí sola?

—Ehhh... Yo... yo estaba... ummm...

La pelinegra de inmediato se fijó en el sonrojo que nació en la castaña. Por lo que continuó sacando armas para obtener información interesante.

—Escuché que no te sentías bien y saliste de clase. ¿Acaso tuviste un encuentro íntimo con algún chico?

—¿¡Qué!? ¡No!

—Pero sí es un muchacho el problema.

—¡No es un muchacho!

—Entonces es un hombre...

—...

—Lo sabía...

Akeno esbozó una sonrisa sádica, sabiendo que tendría mucha información que sacar antes de que llegara su Rey.

En tanto que Aika sintió un escalofrío que le advertía lo que se avecinaba.