👹Capítulo 16👹

64.9K 6.7K 7.6K
                                    

-Shhh- Jungkook chistó con suavidad mientras el Omega se removía inquieto y agitado.

Bajo su pesado y fuerte brazo, Jimin trataba de tomar el sueño por tercera vez en la noche, pero parecía que el calor infernal volvía a apoderarse de él y le imposibilitaba dormir. El Alfa mantuvo sus ojos cerrados.

Se sentía exhausto después de tres rondas, una en la ducha, y una para cada vez que Jimin no pudo dormir. No se veía capaz de complacer a Jimin en aquel sentido, al menos hasta el día siguiente. Mucho menos después de pelear con el saco y tomar la medicación.

El rubio gimoteó y se quejó, cambiando nuevamente de postura en la cama y estirándose hasta coger el osito y abrazarlo con fuerza. Después, volvió a colocar el brazo de Jungkook sobre él y se acurrucó contra el pecho del Alfa.

-Eres adorable- Jungkook lo miró a través de la bruma del sueño- Eres la cosa más bonita del mundo.

Después del sexo en la ducha, Jungkook había enjabonado con cuidado cada rincón de Jimin, lo había explorado y adorado en silencio, para seguidamente enjabonarse a sí mismo. Lo sacó de la ducha en brazos, lo secó y se ocupó de él. Como prometió. Porque Jungkook no rompía las promesas importantes. También avisó a Minwha desde el teléfono de Jimin de que su hijo había entrado en celo y estaba a salvo, y fumó un único cigarro que despejó un poco su mente antes de tomar la cama.

Conciliar el sueño no fue tan sencillo como esperó, no con un Omega que se sofocaba continuamente y necesitaba sexo sin parar.

Maldición, y sólo era el primer día.

Si Jimin era insaciable de normal no quería ni imaginar durante su celo.

Jungkook contuvo la risita para sí mismo y cerró los ojos pensando que era dichoso si todo de lo que debía preocuparse se reducía a eso. Sabía que no era así, pero por el momento bastó para relajarlo y dormirse.

La siguiente vez que abrió los ojos la luz del día bañaba su habitación, y Jimin mordisqueaba su mejilla con ojos azul vibrante.

Había anhelado un despertar como ese.

El Omega mordió más fuerte de la cuenta y el Alfa de Jungkook gruñó. Los Alfas no eran partidarios de ser mordidos. Jimin mordió más fuerte. Entonces el tatuado se giró en la cama, pillándolo desprevenido, y los volteó hasta dejar a Jimin encerrado bajo su cuerpo desnudo y cálido. Su mirada divertida y cariñosa.

Jimin le devolvió una mirada maliciosa.

-Buenos días ¿eh?- Jungkook apartó los mechones rubios de sus ojos y acunó su mejilla.

El Omega lamió sus labios. Lo siguiente que supo Jungkook es que sus pequeñas manos estaban envolviendo la erección mañanera del azabache en una demandante orden para que la utilizara de una buena vez.

-¿Ya?- gimió incrédulo Jungkook- ¿Tan pronto?

¿Sin desayunar?

Jungkook no sabía a lo que se enfrentaba.

Sus rostro se alzó, y a través de los mechones azabaches que caían frente a él visualizó la hora en el despertador. No eran más que las siete. Su ceño su frunció.

Un momento.

Él tenía algo que hacer ese día.

Sus ojos se ampliaron, gimiendo cuando Jimin se escurrió por la cama hasta quedar frente a su polla y succionarla.

-El curso.

Rápidamente, Jungkook salió de encima del rubio y trató de hacer lo mismo con la cama. 

Stitched Hearts ❥ Kookmin Omegaverse {Paper Hearts II}Where stories live. Discover now