Creía que finalmente había logrado sepultarlo. Su poder ya no se escaparía de su control. Qué ingenua había sido... Después de pelearse contra cuatro estudiantes de grados superiores, dejándolos heridos de gravedad, su magia empieza a manifestarse de la peor de las formas. . . . -Tienes mucho valor para acercarte tan confianzudamente y no pedir disculpas por despertarme-Se quejó una voz gutural, ronca por el sueño. . . . -¡¡Juro que me haré un pinche abrigo más pinche grande que el de Crewel con tu pinche piel!! . . . -Por algo estoy durmiendo aquí y no en mi dormitorio. Ahora cállate, pelotudo. No preguntes más, por favor... No preguntes más... No preguntes más...-Repetía como un mantra en su cabeza mientras trataba de no llorar. . . . -¡¡AH-...!! . . . -Siempre serás mi número uno. . . .