Capítulo X

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Una noche antes...

Sus ojos enfocaron al rubio en ése momento, los ojos azules de JiMin le miraron con miedo y entonces soltó su mentón antes de soltar una pequeña risa, una risa vacía y que prometía muchas cosas.

— ¿Por qué? ¿Por qué le enviaste éstas fotos a YoonGi? —le preguntó con absoluta calma mientras se alejaba hasta sentarse sobre uno de los sillones de la qué sería su nueva casa.

El pequeño rubio le miró con los ojos inundados en lágrimas antes de caer al suelo de rodillas, su cuerpo entero temblando y es qué ambos lo sabían, sus acciones serían juzgadas en ése instante.

— K-Kookkie, yo, yo, sólo... estaba tan celoso de él y... lo siento mucho, lo siento de verdad, tienes qué creerme, nunca más volveré a hacerlo —sus pequeñas manos sostuvieron las suyas pero realmente no sentía nada, no estaba mirándolo en absoluto, su vista estaba enfocada en las paredes color marrón de la habitación.

De pronto una de sus manos hizo caricias en su mejilla, sintió la suave piel que durante tantos años lo había vuelto loco, a la cuál se había vuelto adicto, y por primera vez en años... no sintió nada.

— Mí pequeño rey, ¿me crees estúpido?. Sé qué no es lo único que has hecho, supiste del embarazo de YoonGi, ¿no? —y todo el cuerpo del Park se tenso por completo, su semblante pálido de repente y antes de poder pensar en algo sus manos fueron más rápidas al bruscamente sujetarle del cuello.

Y-Yo... no, yo ni siquiera le conocía hasta hace unos días —el ojiazul murmuró en ése momento con evidente torpeza, se había jurado nunca hacerle ningún daño pero quería tanto hacerle sufrir... romperlo por completo.

— No soy estúpido JiMin, así que voy a castigarte, tantos años hiciste sufrir a YoonGi, me arrebataste a mí hija, así que yo voy a quitarte a los niños, después de todo es lo qué siempre has querido, ¿no?, por qué tú no los quieres —y con saña sus uñas dejaron una pequeña marca en su mejilla, su amante soltando un gemido de dolor inmediato.

Le soltó instantes después para levantarse de su asiento, caminando a su lado se detuvo unos pasos más adelante y le miró al girar el rostro, el amante qué se creía rey justo en ése momento no era más qué un vil mendigo.

« — Y JiMin, sí me enteró de más cosas qué estoy investigando... el infierno será poco castigo comparado a lo qué voy a hacerte —su amenaza estaba bastante clara, entonces no miró atrás en ningún momento más.

¿Le amaba? Por supuesto qué sí pero ambos sabían qué sí tuviera que elegir entre uno de los dos, él nunca elegiría a Park JiMin, sobretodo después de lo qué este había hecho.

Porque después de todo... Min YoonGi le había sido más leal.

...

Sus dedos acariciaron la suave mejilla de YeonJun quién soltó una pequeña risa infantil, ah, le quería tantísimo en verdad, su pequeño niño rubio y de ojos azules era una perfecta copia de JiMin y aún así... éste no lo quería cómo un hijo.

JiMin fingía amarlo en público pero él había presenciado en secreto algunos de los malos tratos hacía el niño, y había sido tan estúpido como para pasarlos por alto solo por el amor que le tenía a su amante pero ya no más.

— ¿Recuerdas qué un día te prometí presentarte a un ángel? —los inocentes ojos de su hijo se abrieron mucho y rió bastante enternecido antes de dejar un beso en su mejilla.

— ¡Sí! ¡Yo quiero conocerlo! ¡Y JiSoo también, prometiste qué nos amaría mucho! —y no mentía en eso, porque él sabía.

Él sabía que YoonGi les amaría mucho a pesar de todo.

What If [KookGi]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora