e i g h t

1K 195 45
                                    

La única promesa que Yeonjun cumplió fue aquella sobre ir al cumpleaños de Soobin, pero, al crecer, el pequeño llegó a pensar que sólo había ido porque no tenía de otra

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

La única promesa que Yeonjun cumplió fue aquella sobre ir al cumpleaños de Soobin, pero, al crecer, el pequeño llegó a pensar que sólo había ido porque no tenía de otra. Para el cumpleaños número nueve de Soobin, el niño que no había olvidado ni había parado de hablar de su hyung en tres meses; a petición del mismo pequeño, su madre los llevó a él y Ryujin a Seúl y se quedaron con su tía Somi. También llevaron a Taehyun y a su madre, Jieun.

Aunque tal vez era compensación por todo lo triste que Soobin había estado por el divorcio de sus padres.

Ni siquiera debían decírselo, el menor era suficientemente grande e inteligente para deducirlo.

Le hicieron una pequeña cena en casa de su tía Somi y también estuvieron allí sus primos mayores, Heeseung y Jongseong, a los que no veía hace mucho; no obstante, no hubieron rastros de su hyung hasta más tarde en la cena. Hyuna ahjumma había ido con el hermano mayor de Yeonjun, del que su hyung le había hablado bastante, que se llamaba Eunwoo y le ganaba con muchos años, y con Yeji; asimismo ahjumma había dicho que su hyung llegaría tarde por cuestión de sus terapias y se iría temprano porque tenía una fiesta a la que asistir.

Soobin no entendía que fiesta podía ser más importante que su cumpleaños.

—Creo que se trata de su fiesta de graduación, Soo. Sus compañeros organizaron una fiesta y todos tienen que ir. —le había dicho Taehyun.

Aún así, Soobin sentía que él era más importante que cualquier otro evento.

Pero toda molestia se esfumó gracias a la aparición del —ahora— pelirosa con aquella dichosa sonrisa parsimoniosa que tanto le gustaba y recordaba ser propia de su hyung, aquella sonrisa que nadie sabía, ni siquiera el mismo Soobin, que provocaba que un sinfín de maripositas revolotearan animadamente en su estómago.

—¡Yeonjun hyung! —Soobin había corrido tan rápido como lo había visto y había saltado para que lo cargara.

—¡Feliz cumpleaños, bebé! ¿Mamá te entregó mi regalo?

—Nuestro regalo. —corrigió Yeji.

—Yo lo elegí para él, cállate. —su hyung reprochó haciéndolo reír.

Soobin, aún en los brazos del mayor, le mostró su más tendido y adorable mohín.

—Pensé que ya no ibas a venir, hyung. —le confesó en un murmullo tímido y avergonzado.— Y que ya no te acordabas de mí.

—¡Nene, por favor! No digas tonterías, por supuesto que me acuerdo de ti. Le hablé a todos en mi academia de baile sobre el bonito bebé Soobin que no sabe nadar. —Yeonjun le apretó un poco la nariz y eso provocó que Soobin la arrugara por inercia. El mayor hizo una mueca y el menor supo que diría algo que no lo pondría muy feliz.— Pero sí tendré que irme en unas horas. Mi cena de graduación es hoy y no quiero que me maten por no asistir.

Soobin era un buen niño. Soobin era comprensivo. Soobin le mostró una linda sonrisa para tranquilizar su culpa y le dijo que no pasaba nada.

—¡Voy a tener que aprovecharte ahora! —le había dicho el menor.

Pero, durante todo su tiempo allí, Yeonjun no se despegó de Taehyun. Su hyung le contaba sobre Beomgyu y sobre como eran amigos otra vez. Su primo pelirrojo incluso jugó con los chats de su celular y le escribió al lastimador de su hyung fingiendo ser Yeonjun.

Mientras ambos, su hyung y Taehyun reían, Soobin trataba de pescar un poco de la atención que ellos se daban.

¿Qué si había pasado todo el tiempo en el regazo y abrazado de su hyung? Él casi no lo había mirado.

Las horas de Soobin tratando de llamar la atención de su hyung cuando este le mostraba todo tiempo de cosas a Taehyun no había sido fácil. Logró que el mayor le acepte dulces y lo abrazara con fuerza por un rato, pero no duró tanto porque su hyung empezó a despedirse de todos para ir a su dichosa fiesta.

El menor lo comprendía y lo abrazó fuertemente para que no se fuera, no lo logró, pero su hyung le había dicho que lo amaba mucho y que lo había extrañado, así que no se quejaba. Soobin lo vio subir a un auto que nunca había visto antes y desaparecer en él.

Pero aún así, Soobin confiaba plenamente en las palabras y promesas de Yeonjun.

Pero aún así, Soobin confiaba plenamente en las palabras y promesas de Yeonjun

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

palabras: 732.

editado: 21/05/2022.

BIGGER NOW | CSB FIC.Where stories live. Discover now