Caótico ↬ Johnten ; Norenmin ; Luwoo [NCT]

Capítulo 73

Ápice de luz

Jungwoo había roto la promesa que se había hecho así mismo nuevamente sobre pasar todo el día junto a su hija, mimándola y jugando con ella, pero cuando el mensaje había llegado a su celular con aquellas dos palabras, solo pudo recostarla en su cama, dejarla bajo el cuidado de Donghyuck y salir corriendo hacia el hospital (no literalmente, aunque sí manejó lo bastante apresurado).

Cuando llegó al lugar, por largos segundos se había sentido desorbitado porque había las suficientes personas corriendo por todo el lugar y de inmediato supo que hubo un accidente por la manera en como el personal médico corría con personas en una camilla llenas de sangre. Intentó esquivarlas y se compadeció cuando escuchó el llanto doloroso de una mujer porque al parecer alguien había fallecido.

Cuando llegó a la habitación donde tantos días estuvo Yukhei enclaustrado, pudo darse cuenta como Yuta junto a Sicheng hablaban con el doctor que tantos días lo había atendido, solo alcanzó a escuchar pocas cosas acerca de esa conversación que estaba siendo llevada a cabo.

—... mantenerse aquí por un tiempo porque aún falta que su pulmón sane y claramente debemos ver como evoluciona, aunque como dije antes, todos sus signos vitales están bastante bien, pero aún se mantiene un poco desorientado con su alrededor... no es nada de qué preocuparse—terminó por decir el doctor y luego con una pequeña reverencia se marchó del lugar.

—Dios... ¿entonces está bien? —preguntó, jadeando en busca de aire por haber corrido por las escaleras hasta el piso correspondiente. —¿Está despierto ahora mismo? ¿Ha dicho algo?

—Cuando salimos por orden del doctor aún se mantenía despierto, la enfermera estaba dándole agua porque está un poco deshidratado y también haciendo algunos chequeos más, aunque no ha hablado nada. Cuando salga podrás entrar a verlo —Yuta le informó.

—¿Alguien más fue informado? —preguntó, aceptando la botella de agua que Sicheng le tendía. Tomó un gran sorbo directamente.

—Solo a ti te hemos informado hasta el momento, el doctor dijo que no era recomendable que vinieran muchas personas a verlo de inmediato porque podría afectarle un poco.

Jungwoo asintió, sintiendo todo su cuerpo cosquillear por poder entrar al lugar y abrazar al amor de su vida, muchas emociones recorrían su sistema justo en aquel momento; felicidad, nervios, miedo... Pero no podía verse afectado ahora mismo, no podía dejar que Yukhei lo viera con lágrimas, debía verse como alguien fuerte que se había mantenido luchando a su lado para que pudiera despertar.

La enfermera abrió la puerta minutos después y Jungwoo se levantó de inmediato, ni siquiera dejó que ella dijera una palabra porque ya se encontraba dentro de la habitación, parado en medio del cuarto viendo como Yukhei lo miraba con aquellos ojos que tan enamorado lo tenía.

—Yukhei... —susurró, caminando a pasos rápidos y pronto sus brazos rodearon su torso con cuidado de no lastimarlo y dejó caer su cabeza en su pecho, feliz de poder escuchar esos rápidos latidos que por varios días se mantuvieron de manera lenta, casi sin emoción. —Yukhei... amor mío, estoy tan feliz de que estés bien, no sabes cuanto extrañe ver esos preciosos ojos.

Unas firmes manos tomaron de sus hombros, tirándolo levemente hacia atrás y Jungwoo, aunque no quería separarse de él, se alejó para verlo al rostro. Yukhei parecía estar anonadado, miraba su rostro como si no quisiera perderse de nada.

—Lo siento... —murmuró el chino con voz baja, ronca y dolorosa, pues hasta ese momento no había hablado, ni siquiera se había esforzado en hacerlo. Sus ojos confundidos totalmente miraron el rostro del contrario y Jungwoo sintió algo doloroso en su estómago. —¿Quién eres? No... no puedo recordar...