Capítulo 23

6.6K 467 42
                                    

*Maverick en multimedia*

Ver a Morrigan con la cara roja y los ojos hinchados fue algo nuevo para mí, he visto personas tristes, pero... verla a ella, solo ocasionó que mi pecho se hiciera estragos. Corrió a abrazarme y lloró desconsoladamente, imité los movimientos de Drac cuando me consoló y la estreché en mis brazos, ella se aferra más a mí apretándome con más fuerza.

-L-la he cagado Raven... yo la he cagada de nuevo- susurra con voz baja. Se separa lentamente y levanta su rostro mirándome -. Tengo a alguien esperándome y lo primero que hago es emborracharme y follarme al hijo de puta. Ese no era el plan y veo que terminaste igual que yo.

Mor vestía ropa de hombre y su cabello rubio era un desorden completo, ¿Se revolcó? se podía notar que estaba lleno de nudos. ¿Así me miro yo cuando termino de follar? dios santo...

-No salimos como esperábamos- confesé-. Sin embargo, veo que vienes muy...

-No lo digas que lloraré, mejor dime, ¿Cómo te fue? - levantó sus cejas divertidas.

-Bien.

-Hay que aguafiestas, yo quería saber el chisme completo. Eres una egoísta- bufó rodando sus ojos.

Algo que me agrada de Morrigan es sobre como logra cambiar sus estados de ánimo tan rápido, unos minutos puede estar triste y al otro ya esta sonriendo.

- ¿Él? Veras... yo no entiendo muy bien sobre estas cosas- susurré, realmente me encontraba muy confundida-. N-no sé qué es lo que me sucede cuando estoy con él, ¿Me entiendes?

-Sexy arma, te entiendo... yo estoy igual que tú, y no querida lo de nosotras no es una obsesión simplemente es algo más.

¿Si no es una obsesión que es? No creo que sea amor, porque yo no puedo sentir. Me estoy descontrolando, no me esperaba esté tipo de situaciones.

Yo obsesionada por un asesino, aunque yo también he asesinado...

¿Somos iguales?

El doctor Robert nos interrumpió, corriendo hacia dónde se encontraba un semi muerto Maverick, Mor me miró con cara de confusión.

-Maverick fue herido.

- ¡¿Qué?! Demonios soy una mala amiga, yo follando como zorra y él herido- suelta exaltada, se levanta caminando de un lado a otro de manera dramática-. ¿Por qué no me lo dijiste?

-Porque no me preguntaste- solté.

-Raven deberías de ser un poquito más amable.

-No lo creo.

-Deja de molestar Morrigan- dice Drac, al mismo tiempo que se avienta al sillón-. ¿Qué sucedió? Te ves como la mierda.

- ¿Por qué no me sorprende que... tú y Raven se lleven bien? Son unos insensibles- lloriquea, señalándonos con mirada asesina.

Drac se carcajea haciendo que la rubia lo insulte en ruso, no le entiendo ni mierdas, al parecer son palabras nada amistosas. El sonido de un celular hace que nos quedemos en silencio, Drac lo toma de mala gana y responde.

- ¿Qué quieres Kronos? - pregunta irritado. Mor se tensa y me mira como diciendo "mierda, es él" -. Está bien lo pondré en alta voz.

- ¡Salgan inmediatamente de ese lugar! Llego en un minuto- exclama agitado.

- ¿Qué carajo sucede con Kronos?

-Mierda Drac, si no salen en este mismo momento van a morir.

-Maverick, está siendo atendido por Robert, ¿Cómo carajos lo sacaremos?

- ¡Joder! Escúchame - ordena -. Drac usarás tu ático de lunático, llevarás a Maverick con Robert. Antes que nada, ¿Solo Raven se encuentra contigo?

-Y Morrigan.

- ¡Carajo Mor! ¡¿Por qué no te fuiste a tu maldito departamento?! Siempre te pones en peligro- grita furioso, se escucha como golpea varias veces el volante.

- ¡No es momento para estás mierda Kronos! ¡Así que cállate y dime qué haremos hijo de puta! - responde exaltada Mor.

- ¿Raven me escuchas? Espero que sí, van por ti carajo van por ti, te van a cazar y necesito que te escondas.

-No lo haré, no les daré el gusto- digo, decidida.

Se escucha como susurra para sí mismo un: ¿Por qué las mujeres son tan tercas? Pero lo escuchamos claro.

-Entonces, necesito que salgas como una loca desquiciada y los asesines. Drac, saca tus mejores armas hijo de puta. Mor, cubre a Maverick y a Robert, tienes que lograr sacarlos por la puerta trasera, mi auto estará cerca, búscalo y por favor- se detiene unos segundos suspirando y dice-. No te pongas en peligro. Derek ya se encuentra listo de francotirador en el edificio de enfrente, él defenderá nuestras espaldas.
Micka, ya viene con ayuda. No mueran y si lo hacen, los veo en el infierno.

La llamada se corta, los tres nos miramos y sonreímos. Corremos a la habitación y Drac le da indicaciones a Robert, sujetan las sábanas y levantan a Maverick con cuidado. Morrigan los sigue al igual que yo hacia el ático, nunca me imaginé que Drac tuviera algo así en su departamento, y mucho menos que estuviera lleno de armas e instrumentos de tortura.

Instrumentos de tortura, una niña siendo destrozada, una niña gritando de dolor...

- ¡Raven! ¿Estás bien? Te pusiste pálida- me susurra Mor, mirándome preocupada.

¿Qué fue eso? ¿Un recuerdo?

-S-sí, no pasa nada... estoy bien- sonrío- Es hora de la diversión.

Drac nos tendió armas y de inmediato las tomamos, no me di cuenta que estoy en camisa y sin sandalias. Es eso o moriremos, aunque no me preocupo por morir. No me quedaré de brazos cruzados y dejar que vengan a cazarme. Porque no soy un animal, soy peor...

El hombre por el cual estoy obsesionada perdidamente, se acerca sonriéndome de manera siniestra.

-Diviértete- susurra, pegando nuestros labios, al mismo tiempo que mete sus manos en mis bragas y siento algo filoso helado-. Yo no iré a rescatarte como un héroe hada, sálvate tú misma.

Era cierto... nadie me salva, solamente yo misma.

-No te necesito imbécil.

Se burla.

-Lo sé... Raven y eso me prende.

Sentí como mis labios se tensaban, joder no es momento de pensar con mi vagina. Concéntrate mujer, piensa en sangre, en divertirte, si...

Drac baja corriendo las escaleras y yo detrás de él. Los dos con nuestras dos armas, ya listos para empezar la diversión.

El sonido de las pisadas nos hace entender que ya están aquí, mis dedos de los pies se mueven inquietos, aferrándose al suelo. Uno... dos... tres y el caos inicia.

La puerta es derribada por los hombres y comienzan a disparar, Drac se mueve sigilosamente asesinado a los primeros dos, corro hacia uno y salto dando una patada, de modo que sale volando por unos instantes cayendo al suelo, suelta un chillido de dolor y eso me da tiempo para sacar la navaja de mis bragas y clavársela en el pecho.

Se acercaban a mí y los derribaba con golpes rápidos sin piedad, era como si algo se activara dentro de mi cerebro, indicándome que reaccionara más rápido que el resto. No me importó que mis piernas, pies, manos y la camisa de Drac estuvieran completamente manchadas de ese líquido carmesí que tanto me gusta.

Mátalos Raven, mátalos y hazlos sufrir como te hicieron sufrir a ti...

DRACDonde viven las historias. Descúbrelo ahora