Boyfriend 💞 Karma Akabane

💞 10

Karma caminaba junto a Nagisa y Sugino, yendo hacia su viejo edificio para asistir a clases.

– ¡Al fin terminó la temporada de lluvias!

– Está comenzando a hacer calor.

– Esta temporada es perfecta para actividades al aire libre. ¿Qué les parece si salimos a divertirnos a algún lado?

– ¡Claro! ¿Qué quieres hacer?

– ¿Qué tal pescar? –sugirió el pelirrojo.

– Me parece bien. ¿Qué se puede pescar esta temporada?

– En verano se pueden atrapar delincuentes "frescos". ¡Usemos a Nagisa-kun como carnada y veamos cuántos atrapamos!

– No sabía que los delincuentes eran por temporadas...

– ¿Qué deberíamos hacer?

– Veamos...

– ¿Qué te gustaría hacer a ti, Nagisa-kun?

– ¿Qué tal ir a la playa?

– La playa, eh.

– Suena bien.

El pelinegro se detuvo, mirando hacia la cancha de beisbol donde los chicos jugaban; los otros dos se detuvieron con él. El Capitán del Equipo suspiró, deteniéndose, y giró, viendo a aquel chico.

– ¡Pero si es Sugino! –sonrió.

– Cuánto tiempo.

– ¡Oye, eres tú!

– ¡Sugino!

– ... ¡Sí! –se acercó.

El resto del equipo se acercó también a la reja, para hablar con él.

– ¿Qué te pasa?

– Deberías venir a saludar de vez en cuando.

– No, sería un poco incómodo.

– Lanzarás en el torneo la próxima semana, ¿Cierto?

– Aún no está decidido, pero me gustaría.

– ¡Lo esperamos con ansias! –chocó sus puños con él.

– ¡Seguro!

– Pero te envidio, Sugino. Estás en la Clase E, así que tienes la oportunidad de tontear todos los días. Nosotros tenemos tarea y prácticas, así que estamos algo estresados.

Sugino abrió los ojos con algo de sorpresa y bajó un poco la cabeza.

– Ya basta, esto no es justo. El equilibrio de la tarea con las clases extracurriculares sólo se puede esperar de unos pocos elegidos.

– Eso es increíble –dijo Karma, acercándose junto a Nagisa.– Entonces supongo que eres uno de los pocos elegidos, ¿No?

– ¿No te parece? Entonces, ¿Qué les parece si lo mostramos en el torneo? Existen aquellos que son elegidos para estar en la cima, y están todos los demás. Verán que hay un mundo entero de diferencia entre nosotros.

Tn sonrió. Estaba a unos metros observando a su chico y sus amigos hablar con el equipo de beisbol.

– ¡Hey, Presidenta! –llamó, acercándose.

– Oh, son los perdedores.

– Creo que organizan algo, por eso miraba.

– ¡Averigüemos!

– ¡Eso!

Mao y Aoi cruzaron sus brazos con los de la rubia y comenzaron a caminar, mientras ella reía y rodaba los ojos.