Aroma a Deseo » Goyuu/GoIta

Capítulo 6

Solo vengo a decir que no sé nada de lucha y éste cap no tendrá nada violencia (al menos un poco) me hubiera gustado que Gojo matara a Mahito, joder.
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"Cayendo por ese alfa"

Mahito era un alfa dominante muy atemorizante debido a sus feromonas: estas era intensas y eloquecían a los omegas. Y que siempre se enorgullecía de su gran poder para estremecer incluso a alfas menores. No obstante, frente al alfa que tenía adelante no era más que un espécimen egocéntrico y sobrado. Incluso el omega debajo daba señales de ser dominante, ni siquiera mostraba  sumisión por su presencia.

Yuji, que intentaba mantener la calma por sobre la abundante intensa de una ira ferviente por parte de su alfa, pensó en una manera de escapar de las manos del tipo que aún no tenía intenciones de soltarlo a pesar de la situación. Sentía que, de no hacerlo, quien acabaría en una mala posición sería él.

Se remejó los labios, probando el sabor metálico de su propia sangre, y levantó la cabeza para mirar al hombre que había cerrado la puerta tras de sí por los ansiosos alfas amontonados. Los ojos azules del alfa no estaban para nada serenos aún si usara una sonrisa casual y se viera indiferente.

Yuji nunca había visto a un alfa dominante tan cabreado, y eso es decir mucho cuando tenía por hermano a uno mucho peor.

—Fue una buena decisión venir aquí —dijo Satoru, encendiendo un cigarrillo mientras se apoyaba en la puerta. Observó a Yuji con una mirada afilada—. ¿Es esta tú forma de defenderte? ¿Dejando que otro alfa te someta?

Yuji apretó los labios en una línea fina y esquivó sus ojos acusatorios. Debería estar viendo la cara del alfa para saber que hizo de todo para defenderse y que no se había dejado someter tan fácil. Ahora mismo estaba en condiciones para nada buenas, por lo tanto le costaba un poco escapar de las manos del alfa.

Pero Satoru le acusaba de una manera tan fría. ¿Estaba bien hacer suposiciones por una imagen salida de contexto? Él esperaba que las cosas cambiaran y el alfa, para el que trabajaba, no fuese tan idiota para no ver que allí no hubo una lucha unilateral.

—Pero debo felicitarte, ningún omega sería tan capaz de dejar en ese estado a un alfa.

Desde arriba, echó una mirada al tipo encima de Yuji y soltó, a través de una bocanada de humo, una carcajada.

Yuji suspiró pensando: «Megumi también es capaz de enfrentar a un alfa».

Yuji había visto bastantes escenas de su amigo tomando acción por sí mismo con el insistente Sukuna que nunca, ni pasaran años, desistió de la idea de hacerlo suyo por completo. Era un chico frío que entró por error en una florería hace cinco años y él tuvo la desgracia de conocer a Sukuna. Lo que lo llevó a ser el objetivo de un alfa dominante muy molesto.

—Oye tú, aléjate de él.

La voz de Satoru se manifestó con fuerza.

Mahito miró a Yuji, resopló y se levantó. Le hizo unas señas a Junpei, que se escondía debajo de los lavabos, para que lo ayudara. Junpei intentó ponerse de pies al mismo tiempo que trataba de no expresar renuencia. Realmente se sentía mal. Había una feromona tan penetrante en el aire, mucho más a la que estaba acostumbrada, por lo que sus piernas ni siquiera tenían la fuerza para moverse.

Lo intentó de nuevo, pero no pudo ponerse de pies. Le parecía estar advirtiendo que no se levantara de allí, que mantuviera la posición defensiva y se protegiera. El instinto omega nunca le falló en su vida. Esta vez tampoco fallaría. Y supo que tomó la mejor decisión cuando vio a Mahito recibir un golpe en la cabeza contra la pared que separa los cubículos.