🍓Capitulo 3🍓

5.2K 665 130
                                    

—Kim Sun-I, es mi madre—dijo desesperado.

—Habitación 113, por este pasillo, al fondo, por su izquierda—dijo la enfermera.

—Gracias—agradeció NamJoon pues SeokJin ya había tomado camino rumbo a la habitación.

Sin pensarlo dos veces abrió la puerta, encontrándose con la desgarradora imagen de su madre utilizando respirador artificial. El electrocardiograma no era frecuente, realmente esto mataba a Jin.

—Mamá...—musito.

—Mi algodoncito—dijo débil.

—Shhh, no te esfuerces—se acerco y acaricio la casi platinada cabellera de la mayor.

—Estoy bien—dijo sonriendo apenas.

—Mamá, no lo estas, apenas y si puedes hablar. Es mi culpa, tarde buscando trabajo para poder pagar tus tratamientos mensuales, veras que saldremos de esta, lo prometo... ¡Tu panadería te espera! —intento decir con entusiasmo.

—Jinnie, ya estoy vieja, la panadería ya no necesita de una anciana como yo—.

—Mamá, no digas eso, haces el mejor pastel de chocolate amargo que conozco o que haya probado, o la tarta de fresa que tanto adoran tus clientes—motivaba entre lágrimas.

—¿Qué chiste tiene hacer feliz a los demás si mi único propósito sufre?—dijo ya igual llorando.

—Ay mamá—la abrazo con fuerza.

NamJoon se mantuvo afuera, sin poder escuchar bien la conversación, pero la escena, realmente le parecía un calvario. Hablaba con el doctor a cargo de la señora Kim, pidió una mejor atención y un cuarto individual para la señora. NamJoon no sabía ni porque, pero, ver a Jin en ese estado hacia a su alfa lloriquear y rasguñar por abrazar al omega.

Solo suspiro y se despidió del doctor a cargo dejando todo en sus manos, toco la puerta de la habitación y recibió la respuesta de SeokJin. Al pasar sonrió y la madre lo miro con asombro.

—Buenas noches, disculpen la interrupción—dijo apenado haciendo una reverencia.

—No pasa nada Nam—dijo sonriendo apenas. —Mamá, es el Kim NamJoon. Nam, ella es mi madre Kim Sun-I—los presento.

—Es un gusto conocerla—dijo amable Nam.

—El gusto es mío, disculpa que no esté presentable para esto—dijo apenada.

—No sé preocupe por ello, es entendible su situación—se colocó a un lado de SeokJin.

—Tan lindo—murmuro la señora viéndolos.

—Cierto, Jin, el doctor está afuera esperándote—notifico al menor.

—Bien, ya regreso mamá. Nam te la encargo—sin más salió de la habitación.

—Joven Kim—lo llamo. —¿Le puedo pedir un favor? —dijo sonriendo viendo al techo.

—Claro, dígame—.

—Cuida de Jinnie, él se preocupa demasiado por los demás, pero nunca de él. Siempre me cuido al igual que lo hizo con su padre—una diminuta lagrima se escapo de sus ojos avellana. —Solo quiero que mi hijo sea feliz, yo se que se esfuerza, pero todos tenemos un límite... Yo siento el mío por ver a mi hijo sufrir. Espero y, aunque seas amigo de mi hijo, lo cuides—le sonrió al chico.

—Señora Kim yo...—se quedo mudo por unos momentos.

—Jin es todo lo que me queda desde que mi alfa falleció, esta anciana nunca pide favores, pero en esta ocasión necesita uno—cerro por un momento los ojos dejando escapar más lágrimas.

ᴮᵒᵒᵏ | El pequeño Kim | ᴺᴶWhere stories live. Discover now