D I E Z Y O C H O

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Corazón roto

(CAP 19 se desbloquea a las 20 ⭐)

El día se fue lento, no podía dejar de pensar en lo mismo “El condón estaba roto”  ¿Cómo pudo pasar?

Por los nervios que me dejaron las palabras de Malcolm no pude probar ningún bocado.

Todo estaba mal.

—Athenas— Mientras estaba sentada repasando afuera en un roble una voz conocida me sacó de mis pensamientos.

Al girar pude verlo, ese chico que lo único que hacía era complicar las cosas más.

—¿Eidan? ¿Qué demonios haces aquí?—Le preguntó mientras me levanto del lugar donde estaba sentada, es mejor estar prevenida.

—Si, es un gusto verte también —Responde con sarcasmo sentándose en el mismo lugar donde estaba yo hace un segundo.

—Dejate de tonterías, no vienes aquí porque seamos los mejores amigos.

—¿Y porque no somos mejores amigos?

—¿Que clase de pregunta ese esa?

El no respondió a mi pregunta, solo me miraba levantando las cejas en espera de una respuesta, al parecer el idiota de verdad quería saber porque no éramos amigos.

Uno —Comencé a contar con los dedos de mis manos— para empezar eres un idiota, te gusta abusar de la gente, Dos; eres agresivo, te vota la cabeza con la mínima provocación. Tres; Eres orgulloso y egocentrico, piensas que el mundo gira a tu alrededor. Cuatro ; Participas en peleas clandestinas, no me gusta involucrarme con gente que está en la ilegalidad...

—JA JA JA JA JA JA —La risa escandalosa de Eidan me interrumpió de golpe —Estaba diciendo en mi mente “Si, Athenas esta en lo correcto esas son buenas razones para no ser mi amiga” hasta que dijiste “Ni mi guisti invilicrirmi cin ginti qui isti in li iligilidid” — Me arremeda poniendo cara de idiota y voz de pitó.

—¿Qué tiene eso de malo? —por mi tono de voz es notable que estoy ofendida.

—Ja, ja, ja ¿Qué si que tiene? —Se sigue burlando — Todos están metidos en alguna ilegalidad... Tu amiguita Sierra es la organizadora de esos horribles eventos donde te recuerdo fuiste y incluso apostaste.

—Si pero...

—Después tenemos a la otra acosadora que no se ni me interesa saber su nombre, todo el tiempo siguiéndome, sabe mis datos personales, mi historial delictivo y hasta donde vivo, si no lo sabias el acoso es un crimen.

—Claro pero...

—¡Y para coronar la cereza del pastel! —De nuevo le interrumpe y esta vez en voz muy alta —¡Ese profesor pederasta con el que siempre te veo! Donde sea que vayas el esta detrás se ti ¿Crees que tiene buenas intenciones? Lo conozco desde hace mucho tiempo y puede ser todo menos un profesor ejemplar, ese wey sólo te quiere cojer...

—¡¡CALLATE!!

No lo pensé, en un momento Eidan estaba gritando esas cosas en medio del patio escolar y al otro ya estaba yo arriba de él tapandole la boca para evitar que todo el mundo siguiera escuchando lo que él decía.

Eidan estaba sorprendido, anteriormente tenía una cara de diversión pero ahora cambió en segundos, primero a una genuina sorpresa, enseguida un rostro serio y firme, para finalizar un rostro ligeramente molesto y serio se vio en el.

No tardó un segundo en levantarse, tomar mis manos y quitarlas de su boca, no me soltaba y apretaba con fuerzas.

—Sabía... Lo sabía ¡Con una mierda!

¡Le hice un amarre al chico equivocado!Where stories live. Discover now