Destined - Sydger / Wrightmour

XXI

❝ Única advertencia. ❞

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Richard terminaba de cortar perfectamente las verduras que usaría para preparar la cena, suspiró mientras hacía esa tarea. Su, ahora novio, David no le había llamado después de que se despidieron en el departamento y eso le preocupaba. Sus mensajes eran ignorados por completo.

Estaba preocupado de que algo realmente grave le hubiera pasado junto a Syd, o también que algo malo haya sucedido con el menor. Negó con la cabeza revolviendo su cabello en el proceso para despejar su mente de las imágenes que comenzaban a llegar, tenía que pensar positivo.

Escuchó la puerta de su casa ser abierta, esperó por el típico "¡estoy de vuelta, cariño!", pero jamás llegó. Así que, limpiando sus manos con una toalla salió de la cocina para averiguar que sucedía con su madre.

ㅡ Estoy por empezar con la cena ㅡ le dice con una sonrisa, pero la mujer solo le ignoró haciendo que los nervios se apoderaran de su cuerpo y pensamientos ㅡ, ¿pasa algo, mamá?

La señora Bridie dejó las bolsas del mandado sobre el mesón, y sin decir palabra algúna, se sentó en el sofá bajo la mirada atenta de su hijo. Cruzó las piernas y le dedicó una mirada a Richard que le hizo marear.

ㅡ Sucedió algo muy interesante cuando estaba de regreso a casa ㅡ comenzó a hablar ㅡ. Un jovencito estúpido chocó conmigo e hizo caer mis bolsas.

ㅡ Lamento eso, madre, ¿las bolsas se rompieron? Pudiste llamarme para ir a ayudarte, ¿por dónde fue?

La mujer frunció el ceño.

ㅡ Eso te hubiera gustado, ¿no? El muchachito estúpido resultó ser alguien que conoces, esa mala influencia ㅡ tomó un poco de la tela de su sueter delgado ㅡ. Que asco, ese niño me dejó apestando a cigarrillo.

David. Solo él cumplía con esas palabras, pues su madre las decía a menudo. Su pecho dolió al imaginarlo fumando de nuevo, él se lo había prometido...

ㅡ Oh, no me digas, David ㅡ bufó, tratando de ser lo más creíble posible ㅡ. ¿Y qué con eso?

ㅡ Tú dímelo, es tu novio, ¿no?

Las piernas de Rick temblaron como gelatina y sintió que todo color de su cuerpo se esfumó en un parpadeo. ¿Cómo se había enterado? ¡y tan pronto!

ㅡ ¿D-de dónde sacas eso? ㅡ trató, en serio trató de hacer un gesto serio, pero una sonrisa traicionera quería aparecer en sus labios.

ㅡ De ese estúpido, él me dijo que están saliendo, ¿acaso vas a negarlo?

Todo su mundo se vino abajo en un abrir y cerrar de ojos, por supuesto que lo negaría, al menos por ese momento. Le confesaría lo mucho que adora la acompañía de David en un mejor momento, si es que llega a encontrarlo.

Sus ojitos nerviosos pasearon por todo rincón de aquella habitación, el calor producto de los nervios recorría su cuerpo y pudo sentir como sus labios temblaban.

ㅡ Es falso, te juro que es una mentira mamá, yo nunca saldría con alguien como David, por favor cree en lo que digo. Yo nunca saldría con alguien que no apruebas.

Sintió naúseas por sus propias palabras, estaba negando a Dave, al chico que quería, sólo para tener feliz a su madre. También sintió asco de sí mismo.

La mujer se quedó en silencio por varios minutos, analizó las palabras de su hijo, su lenguaje corporal y trató de leer en sus ojos si lo que había dicho era real. Rick tenía la mirada oscurecidas siempre, perdida, sin brillo, triste. En ese momento así se encontraban sus ojos, por eso creyó que le decía la verdad.

ㅡ Estás advertido Rick, no quiero verte cerca de David Gilmour. No mires en su dirección, no respires ni siquiera cerca suyo, no nada, ¿entendido? Es la única advertencia.

El infierno de Rick Wright recién comenzaba.

༄

Al día siguiente, un tímido castaño caminaba a pasos lentos e inseguros hasta su institución luego de bajar del autobus. Tomó con fuerza los tirantes de su mochila mientras su mente era un lío, un caos de pesamientos negativos.

¿Cómo le iba a decir a David que negó su relación? No podía, no sabía cómo hacerlo pero Gilmour poseía un don de leerlo fácilmente con echarle una mirada rápida. Era como un papel o una bola de cristal.

ㅡ ¡Rick, bebé! ㅡ detuvo sus pasos y miró hacia atrás para ver quien le llamaba. Era su novio, David ㅡ. Hola amor, no podía dejarte sin un beso de buenos días y buena suerte.

Apenas y sus miradas se conectaron, el más alto comenzó a llorar de la pena y la decepción que sentía de sí mismo. David supuso que se trataba de su madre y su choque accidental del día anterior, así que envolvió el delgado cuerpo contrario con sus brazos.

Las manos de Richard se aferraron de la chaqueta ajena, mojándola con sus lágrimas amargas.

ㅡ Lo siento tanto ㅡ dijo con un hilo de voz. Tan miserable.

ㅡ Rick, ¿qué te dijo? ㅡ le preguntó en un tono bajo. Se separó un poco de su cuerpo para limpiarle las mejillas sonrosadas con sus pulgares ㅡ. Puedes contarme tus problemas, no te quedes con ese veneno dentro de ti. Para eso estoy aquí, ¿de acuerdo?

Wright asintió y luego miró sus pies.

ㅡ Ella me dijo que no me quiere cerca tuyo, y creo que casi se pone a gritar de forma histérica porque le dijiste que estamos saliendo, que somos novios, ¿en verdad le dijiste? ㅡ levantó la mirada.

ㅡ Lo siento, las palabras salieron por sí solas de mi boca. Pero ella debía saberlo, no lo vamos a ocultar, quiero tener citas contigo, llevarte a cenar, ver películas en mi departamento...

ㅡ Le dije que no.

ㅡ ¿Le dijiste no, sobre qué? ㅡ el chico frunció el ceño.

ㅡ Sobre nuestra relación.

Aquello le hizo sentir dolido, su corazón se sintió herido y triste. Desvió la mirada por unos segundos.

ㅡ ¿Me negaste? Rick, ella se dará cuenta, y es mejor que se lo digamos antes de que compruebe tus mentiras por ella misma, eso empeoraría la situación ㅡ dijo.

ㅡ Podemos, podemos esperar sólo unas semanas para decírselo. Por favor David, sólo unas semanas ㅡ pidió.

Volvieron a mirarse fijamente, y el ojizarco asintió lentamente. Aceptando. Debía tener en cuenta las inseguridades de su novio, y todo el daño que esa mujer le ha causado toda su vida.

ㅡ Sólo unas semanas Rick, y hablaremos con ella. Los dos juntos. Es más, sólo me harás compañía y yo hablaré ㅡ acercó el delicado rostro entre sus manos y plantó un beso sobre su nariz, haciendolo sonreír al instante.

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