DUELE AMAR, MI CEO

* Capítulo 17 *

Al día siguiente

*En el hospital*

No puedo creer que Pilar este enferma. Tengo que ir a verla ella y Juan fueron muy buenos conmigo. No quisiera que nada malo le suceda a la única amiga de mi madre.

- Mami, ¿iremos a ver a la abuela?- pregunta mi pequeño. Menos mal está de vacaciones, no se que haría si mi bebé no estaría conmigo.
- Sí, mi vida. Vámonos- tomó su manito y antes de entrar a la habitación suspiro.

Al entrar a la habitación y verla acostada en esa cama, mi corazón dolió como si varias flechas hubieran atravesado en él.

- B..Bianca, mi pequeña. Te extrañé mucho- suspira.
- también te extrañé, Pilar- la abrazo y lloro.
- Pequeña, ¿cómo has estado?- pregunta mientras limpio su rostro y ella el mío para luego percatarme que su mirada se fija en mi pequeño mientras una gran sonrisa se posa en sus finos labios.
- ¡Bianca! El pequeño es de James,¿verdad?- asiento y estira sus brazos para acariciar el rostro de mi bebé.
- Es idéntico a James, solo que tiene los ojos azules igual que tu padre- no creí que lo sabía, es por eso que dejó que me marchara.
- Sí, abuelita. Me paresco a mi papi, pero ya no llores, eres muy bonita para llorar- abraza y llena de besos el rostro su abuela.
- Me alegro que estes bien. Ahora que los vi, me siento mucho mejor- suspira.

Estuvimos conversando sobre todo lo que pasó después de que me fui. Me siento culpable y mi pecho duele.

- ¿Bianca? Este pequeño...- después de que Juan entró a la habitación y habló, asentí y afirmé que Ethan es aquel bebé que no perdí.
- Ethan, mi vida. Juan es tu abuelito- mi bebé llora y abraza a su abuelo después de conocerlo.

Lloro de felicidad, al ver a mi pequeño contento.

Minutos después

Después del feliz encuentro con los padres de James, tuve que contarles el por qué tuve que mentir que había perdido a mi bebé.
Al despedirnos, pude notar el alivio en sus rostros.

Una semana después

* James *

Bianca sin duda cambió. Como pude creer que mi bebé no es mío cuando se parece mucho a mí.
Después de todo es normal el color de sus ojos, ya que son los mismos a Alejandro, el padre de Bianca. No puede ser que después de todo este tiempo siga siendo un estúpido.
Si no hubiera investigado no hubiese luchado por su amor. Pero no entiendo por qué no me dice la verdad, ¿quizá su padre la prohíbe? También me enteré, que ese hombre de aquel día es su guardaespaldas y es por eso que ese idiota la persigue.
Tengo que ir a verlos. Ahora que sé la verdad no pienso dejarlos ir.

Minutos después

Toc toc

Veo a mi pequeño después de haber abierto la puerta. Sin duda es mi hijo.

- ¿No abrazarás a tu papá, Ethan?- sus brillantes ojos se llenan de lágrimas y me abraza.
- Te quiero y extraño mucho, papi- es mi culpa que no haya estado ahí para él.
- También te quiero y extraño mucho, mi pequeño- dejo un beso en su pequeña frente.

Lo llevo cargado hasta la cocina, en donde se encuentra el único amor de mi vida.

- Mi vida, ¿quién es?- voltea y se asombra al verme.
- ¡Mami, mami! Es papi- dice mi bebé contento.
- James...- niega con la cabeza.

No puedo creer que siga mintiendo, luego tendrá su castigo.
Estaba dirigiéndose a la sala y sostengo su mano para unirla a nuestro abrazo familiar.

- Los amo y extrañé mucho durante estos cinco años- unimos nuestras frentes.

Me siento contento de tener en este momento a mi esposa e hijo sanos. No pienso dejarlos ir esta vez.

* Bia *

Esta semana visitamos a los abuelos de mi Ethan. Mi pequeño adora a sus abuelos y ellos también a mi bebé. Estoy feliz de que hayan dado de alta a Pilar y aliviada de no haberme encontrado con James, pues me dijeron que estaba muy ocupado y eso no lo dudo siempre ha sido muy trabajador.
También visitamos a mis tíos, a quienes mi bebé conoce pues ellos siempre nos visitaban. Al igual que Ly, quien se casará con Robert y quien me hizo reencontrarme con mis amigos en una cafetería, en donde me enteré que Esteban y Alicia se casaron hace un año.
Y sobre Francesca, pues ella no era la hija de mi tía, sino de su hermana, con quien hace cuatro años se fue a vivir. Las cosas con Frances se arreglaron, me pidió perdón por el pasado y pues quería vivir una buena vida.

Estoy feliz de que mis amigos y familiares sean felices.

Estaba con mi pequeño en la cocina. Mi bebé hablando de lo guapo que es su padre y yo escuchando y sonriendo mientras cocino. Hasta que tocan el timbre y mi pequeño quería ir a ver quien era. Pasó unos minutos y escucho unas pasos firmes que se asoman a la cocina, pregunto a mi pequeño quien era y volteo para ver a James cargando a nuestro hijo. Los nervios me hacen querer huir, pero James me detiene y me une a ellos para abrazarnos mientras lo escuchamos confesar su gran amor por nosotros. Aunque dudo que me ame.

Minutos después

- ¿Siempre es así de tranquilo?, nuestro pequeño es muy obediente e inteligente- acaricia el rostro dormido de Ethan después de haber cenado y compartido momentos como familia.

Dejamos un pequeño beso en la mejilla de nuestro bebé y salimos de la habitación, para después ir a la sala.

- Bianca, ¿a dónde crees que vas?- estaba a punto de irme a mi habitación porque no sabía si contarle la verdad.
- Yo..., tengo que...- rodea mi cintura y acaricia mi mejilla.
- Bianca, por favor no mientas mas ¿Quieres herirme por el pasado?, porque si es así ya lo has hecho los últimos cinco años- sus ojos y sus palabras son sinceros, puedo ver que que así fue.

Terminaré con esta mentira de una vez, no soporto verlo lejos de mi bebé. Y aunque no me ama como lo dijo hace una semana, eso no es impedimento para que vea a su hijo.

- Es verdad, Ethan es tu hijo y lo siento mucho separarte de mi bebé. Tambien puedes firmarlo como su verdadero padre y venir a visitarlo todos los días- suelto sus manos y voy llorando a mi habitación.